REAL MADRID
Ronaldo quiere quedarse
Ha comprendido lo que es la casa blanca, hoy es el líder del equipo y el club prepara su oferta de renovación
Ronaldo quiere quedarse
Desea continuar en el Real Madrid . Quiere hacer más historia en el club más famoso del mundo. Ha lanzado un guiño de que está dispuesto a quedarse en la entidad por mucho tiempo. Lo expresó en el césped, después de su gol al Málaga: « ... Yo hablo en el campo, quiero quedarme aquí». Ahora entiende lo que es la casa blanca. Ha comprendido a la afición, que tiene un poso de experiencia, heredado de abuelos a padres y de padres a hijos. Esa sabiduría no la posee ninguna otra entidad. En el Bernabéu han jugado los mejores futbolistas del mundo desde los años cincuenta, cuando Di Stéfano revolucionó el club. No gusta la soberbia, sino la calidad. No agrada el egoísmo, sino la defensa del Real Madrid por encima de todo. Cristiano Ronaldo (Funchal, 1985) ha asimilado esos conceptos. Cuando vino era muy joven, 24 años. Ha madurado. Aquí es donde ha explotado todo su potencial.
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Ferguson, que se retira del banquillo, está sorprendido del salto adelante dado por CR7. En Manchester nunca llegó a rendir así. Ahora, el portugués es el líder del madridismo. El jefe del Madrid, unido en el campo por encima de todo. Ha cogido la bandera de la entidad. Ha olvidado sus viejos individualismos y tiene asumido que el bien del club es un fin superior. Con un dato añadido que es fundamental: el bien del equipo es, al final, el bien suyo. Trabaja a tope para que todos sus compañeros se sientan a gusto jugando a su lado. Y ellos se lo devuelven dándolo todo por él.
Implicado con el plantel
Su implicación se produce dentro y fuera del campo. Dentro, con su rendimiento sobrenatural, Marcando goles y dándolos con generosidad, como sucedió frente al Málaga. Fuera del césped, con su participación en las decisiones de la plantilla. Antes no intervenía en las reuniones de grupo. Dejaba que Casillas y Ramos, los capitanes, llevaran el timón. Hoy se ha unido a ellos en la gestión del plantel. Es participativo. Le importa lo que piensa y decide la plantilla. Aporta su visión. Es escuchado. Esta postura es otra demostración de su anhelo por ser importante en la entidad durante mucho tiempo.
Guiños a la afición
Florentino Pérez, que se las sabe todas, ha elegido a Íker, Ramos y Cristiano como sus banderas del futuro, con independencia del entrenador que haya. A eso se le llama visión de lo que significan en el Real Madrid y de lo que significan para los aficionados.
Tiene contrato hasta 2015 y el presidente quiere renovarle hasta 2017, con un contrato de 12 millones anuales netos, el mismo que posee Messi. El luso desea que se le otorguen también los premios extras y el reconocimiento que tiene Leo en el Barcelona. El Madrid ya le reconoce en la máxima medida. Se le apoya en los premios internacionales. Han cambiado muchas cosas para que se sienta a gusto.
Ronaldo es feliz. Lo dice. El público le aclama y él responde con gestos. Mourinho le ha dicho que renueve. Los veteranos le subrayan que el Bernabéu nunca ha coreado el nombre de un futbolista tantas veces como él lo disfruta él en cada partido. Di Stéfano le espeta una máxima: «Sigue donde mejor has rendido». Es difícil de conseguir este nivel en otro sitio. Ronaldo hace caso a los sabios.
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