champions league
Lewandowski ingresa en la memoria negra del Real Madrid
El delantero del Borussia es el primer jugador que marca cuatro goles en un partido de Champions; costó 4,5 millones
j. c. carabias
El partido empezó mucho antes del minuto uno en Dortmund. Antes, incluso, de que Mourinho y Klopp compartiesen chanzas en un cordial saludo previo a la rivalidad en el campo. Arrancó sin peajes para el Borussia de Dortmund cuando su «speaker», el exfutbolista Norbert Dickel, ... pronunció los dos nombres en discordia y no hubo réplica hostil de la grada. Götze y Lewandowski, las dos estrellas del equipo, fichado el primero por el Bayern; en la rumorología el segundo, también en la futura agenda de Guardiola. No hubo crítica de la parroquia, siseos o similares. Todo quedó como estaba.
Esa distancia alemana respecto a la pasión española por el fútbol alivió primero a Götze y, sobre todo, a Lewandowski, inconmensurable el polaco. La primera aparición de Götze terminó en gol de su compañero: aclaró su espacio con una finta armoniosa, lanzó un centro envenenado que tuvo una respuesta tibia de Diego López en el área pequeña y Lewandowski metió el pie raudo ante Pepe.
Cada vez que se buscaron el teutón y el polaco, sufrió el Madrid. Tiqui-taca estilo cuenca del Ruhr, con sudores fríos para Pepe y Varane. En el segundo se desató el polaco de 24 años, criado en el Lech Poznan y que consiguió el año pasado 29 goles en la Bundesliga. Lewandowski le amargó la noche a Diego López, en particular, y al madridismo, en general, con tres goles más en una secuencia sin fin. Empezó con una pillería mientras los defensas blancos esperaban el fuera de juego. Siguió con una maniobra solvente: un rebote que convirtió en un derechazo a la escuadra después de fintar y dejar en evidencia a Pepe. Y terminó con un penalti lanzado al modo Neeskens, aquel holandés que chutaba alto y por el centro. Cuatro goles de Lewandowski en una semifinal de la Champions ante el Madrid. Categoría de hazaña. Desde Boniek, ningún polaco había despuntado tanto en el fútbol.
Fue su consagración. Tipo solitario, callado, de enorme zancada y hábil capacidad para asociarse que llegó al Dortmund del Poznan por 4,5 millones merced a la influencia de un conocido agente, Michael Zorc.
Ha crecido varias leguas con el entrenador Jurgen Klopp y ha adquirido una notoria regularidad ante el gol. Marcó 22 tantos en la campaña 2011/12, cuando asumió galones de titular, hizo 29 el pasado curso y lleva 27 en la actual. Está casado con la karateca polaca Anna Stachurska, bronce en el Mundial de Tokio 2008. Fue el protagonista total del partido y de la desdicha del Madrid. «Ha sido su noche», resumió Klopp.
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