Icónica Sevilla Fest: la energía del 'Dragón' de Lola Índigo desborda la Plaza de España

Aquella dulce 'Niña' que dejó atrás ese gamberro 'Akelarre' en 2018, su primer proyecto tras haber sido la primera expulsada del fenómeno OT 2017, experimenta ahora esta transición a adulta con 'su tercer disco, 'Dragón', que rebosa soberbia, personalidad y estilo, poniendo sobre la mesa todas las piezas de un puzzle hacia esta metamorfosis a animal mitológico, en una gira por toda España con una singular puesta en escena basada en detalles oscuros sirviendo su madurez y energía con explosivas coreografías y efectos muy arriesgados.

De hecho, el inicio del concierto estuvo cargado de magnetismo al entonar Lola Índigo su primer tema 'AN1MAL' mientras salía del cascarón de un huevo gigante blanco que presidía el escenario. La cuidada y meticulosa coreografía y los efectos visuales diseñaban una escena única propia de una película de ciencia ficción donde Índigo se imponía como si de una heroína se tratase. El público se entregaba desde la primera nota. «Esto es muy chulo para mí, Sevilla, porque el año pasado yo estaba aquí viendo a 50Cent con mi amigo Satu y dije: 'Ojalá algún día pueda tocar aquí'. Y eso fue el año pasado. Solo os digo una cosa, hay que manifestar las cosas, el que no llora no mama», decía emocionada. Le seguía 'Para olvidarme de ti', una explosión de baile que duró 20 minutos en total hasta el remix de '¿Dónde están las gatas?' que fusionó con el tema 'Discoteka'.

«Yo sé que en Sevilla hay mucho arte. Esta es mi casa», señalaba Mimi, mientras daba paso al tema 'Turismo'. Seguidamente presentaba a una joven promesa sevillana, Marta Santos, que cantó a dúo 'Cómo te va' con toques de rap y flamencos. «Para mí, esta niña es una gran promesa, pero ella ya lo está petando», señalaba.

Con 'Toy Story' vino ese cambio de registro y la alegría invadía el escenario. Tras este tema, vendría 'La Niña de la Escuela' con el que la Plaza de España saltaba por los aires coreando una de sus canciones más aclamadas. El baile, una de las señas de identidad en los espectáculos de Miriam Doblas, se hacía un imprescindible. La transición a '4 Besos', el tema que creó junto a Rauw Alejandro y Lalo Ebratt, rugió como un huracán y desde la primera nota el público no paraba de cantar. Y de ahí pasó a la explosiva 'Tikitiki'. Con 'Dragón' llegó el momento más íntimo y Lola Índigo la interpretó con cambio de vestuario mientras dos dragones la protegían de fondo.

La artista granadina hacía un parón en medio de su repertorio para dedicar todo el espectáculo al Orgullo Gay, señalando que este sábado era la celebración de la marcha en la ciudad y haciendo alusión a diversas agresiones a parejas homosexuales y menores. «Todavía hay gente que dice que la marcha no es necesaria, desde ya que se vayan acostumbrando», comentaba. La cantante seguía desgranando su último disco sobre las tablas, en donde tenían cabida temas como 'Corazones Rotos', 'Ultravioleta' o 'High', una de las más coreadas. En un momento de la actuación, cuando ya se vislumbraba el final, la cantante paraba para que el servicio de asistencia pudiera socorrer a una persona, a la vez que lanzaba botellas de agua al público. El colofón vino con 'La Santa', Trendy', 'El Tonto' y por supuesto, el tema que no podía faltar 'Ya no quiero na', el sencillo con el que se dio a conocer en 2018.