Conciertos
Coque Malla: «Tocar el disco entero en su orden, casi como una obra de teatro, es lo más diferente que he hecho»
El artista Coque Malla llega a Sevilla con su gira 'Aunque estemos muertos' al Cartuja Center CITE el próximo 15 de marzo presentando su último disco homónimo
Doce conciertos que van a arrasar en Sevilla y para los que ya (casi) no quedan entradas
Los festivales de música de Sevilla más destacados de 2024: fechas y conciertos
E. M. Malpartida
Sevilla
La música nos hace sentir vivos, entre otras cosas, porque nos aleja del vértigo de la fragilidad por unos instantes. En este hábitat conviven las diez canciones del último disco de Coque Malla, 'Aunque estemos muertos' (Warner Music, 2023). Un LP cuya atmósfera sonora ... resulta levitante y luminosa a pesar de cargar en sus letras con las pesadas sombras de la muerte y la pérdida.
Para capturar el ecosistema onírico donde nace este disco y trasladarlo al directo, el artista madrileño ha trabajado junto a su banda (Amable Rodríguez, Héctor Rojo, Gabriel Marijuán y David Lads) dejando aire para la improvisación pero manteniendo la base y el orden con la que se crearon estos temas. Este esfuerzo artístico ha ocasionado un show enérgico e intenso con el que el artista y su banda están recorriendo todo el país. Una gira que entre sus fechas incluye a Sevilla, donde estarán el próximo 15 de marzo en el Cartuja Center CITE.
-¿Cómo está yendo la gira?
-Increíble. Estamos muy contentos. El otro día lo comentábamos después de Valencia, que fue un concierto memorable. Normalmente las giras empiezan con altibajos hasta que todo encaja. Hay muchas cosas que afinar: las luces, el repertorio, etcétera. Esta gira ha empezado arriba y no ha bajado. Es una estructura de espectáculo y un repertorio muy especial y diferente. Hay dos actos: en el primero tocamos el disco entero ['Aunque estemos muertos'] de arriba a abajo respetando ese clima tan especial que tiene. Luego hay un segundo acto con todas las canciones conocidas, homenajes a Los Ronaldos, mucho más festivo.
Esa mezcla es brutal. Una primera parte teatral, hipnótica, más reflexiva que luego desemboca en la cosa festiva de la segunda parte. Es brutal, la gente lo ha entendido y ha entrado al juego perfectamente. Eso la convierte en una de las giras más especiales y diferentes que he hecho. Estamos disfrutando mucho. Mucho, mucho.
Coque Malla en Sevilla
-
Dónde: Cartuja Center CITE Sevilla
-
Dirección: C. Leonardo Da Vinci, 7, 41092 (Sevilla)
-
Cuándo: 15 de marzo
-
Horario: 21:00 h.
-
Precio: desde 28€.
-
Entradas: Pincha aquí
-¿Qué es lo que más le está emocionando de esta gira, lo que más está disfrutando?
-El reto de tocar el disco entero en su orden, casi como si contáramos un cuento al público, como una obra de teatro, es lo más diferente que he hecho. Nunca lo había hecho. Está siendo muy especial y muy novedoso. La mezcla de las dos cosas, la parte más hipnótica y la parte festiva es lo que lo hace increíble, pero la segunda parte la hemos vivido en otras giras y la primera parte no. Por eso disfrutamos casi más de la primera parte, pero mucha gente también. Hay mucha gente que escribe y dice «la segunda parte me gusta mucho, pero la primera parte es flipante».
-Apuntando a eso que ha mencionado sobre que la primera parte es como una obra teatral, como una historia y aunque no haya sido una decisión compositiva para esta ocasión, si este disco fuese un libro o una película, ¿qué historia contaría? ¿qué historia se imagina?
-Claro, es que no lo es. No es una obra teatral, ni es un libro, creo que es como un viaje a través de pensamientos que tienen que ver con la pérdida, con la fragilidad, con el miedo a las cosas que se acaban. La muerte como asunto real, pero también como metáfora de las cosas que mueren. Tiene un poco como estructura, ritmo e historia pero no es una narración literal. Es abstracta. Al convertirla en una narración literal perdería su esencia inmaterial, onírica e hipnótica. No hay una conclusión. Es como intentar traducir una sinfonía al lenguaje de narración literaria. Es muy difícil, salvando las distancias, por dios, pero cómo le pones una narración a una sinfonía de Beethoven, no se me ocurriría. No lo es, no se me ocurriría.
-'Aunque estemos muertos', la gira, el disco, tienen como tema central la muerte. ¿Cree que, en cierto modo, un disco así pude resultar liberador, una forma de sentirnos acompañados en el vértigo aunque sea por un rato?
-Supongo que sí, supongo que cada uno lo vive a su manera. Es difícil entrar en la mente de cada espectador. Sí que es verdad que en la presentación del disco, cuando he ido a distintas ciudades a firmar discos, mucha gente me ha dicho que ha sido muy liberador. A mí eso me ha parecido un halago muy bonito.
Me dejó flipado una mujer que vino y me contó que había perdido a su marido, una situación terrible, y dijo que el disco le había hecho por primera vez en mucho tiempo relajarse, salir a la calle, que había sido muy terapéutico para ella este disco. Me conmovió. Supongo que sí, que hablar de cosas tremendas con calma, y el disco lo hace, te tranquiliza. Hacerlo en público, todos en el mismo espacio, en ese clima, puede ser terapéutico. Cada uno lo vive a su manera.
-Este disco, a pesar de las emociones de las que nace, no es mortuorio ni se regodea en ello, sino ofrece ese lugar de paz y enérgico donde nos sentimos vivos.
-Creo que es un disco escrito desde la vitalidad, que no es solo la felicidad, puesto que estar vivo no solo conlleva estar feliz y comer una paella con los amigos, sino que la vitalidad es tristeza, brutalidad, enfado y cosas oscuras. Estar vivo es transitar por los dos terrenos, el luminoso y el oscuro.
-¿Cómo convive Coque Malla con ese vértigo, con ese lado oscuro?
-¡Como puedo! Aparte, el disco tampoco es un diario de mi vida. Las obras de los artistas muchas veces no reflejan su estado de ánimo o todo su estado de ánimo, quizás solo una pequeña parte de su alma donde se pone la lupa y parece muy grande. A lo mejor esa preocupación, esa obsesión, esos pensamientos dedicados a la fragilidad y a la muerte son una pequeña parte de mi vida. Solo que con esa pequeña parte he hecho un todo. Mi vida desde hace unos cuantos años, y espero que dure mucho, está muy estable, muy feliz y muy luminosa.
-En algunas entrevistas menciona que este disco ha sido más experimental, como salir de una jaula, y liberar una parte melódica distinta, menos sinfónica. En este punto la banda ha sido un factor clave. ¿Siente que se abre un camino a explorar?
-¿Por qué no? No lo sé. Como dice Keith Richards lo sabré cuando llegue ahí. Hablando Richards de su relación con Jagger y cómo trabajan juntos, él siempre dice que Mick quiere planear todo lo que va a ocurrir y él es más de decir «lo sabremos cuando lleguemos». Yo también soy así. Soy más instintivo, bastante impulsivo en mis creaciones, agarro la guitarra y no lo planifico. Por ejemplo, con este disco no me senté un día y dije «voy a hacer un disco sobre la muerte». Empecé a tocar, empecé a escribir e inconscientemente surgieron frases que me llevaron ahí. A partir de un punto sí dije, bueno, parece ser que el asunto a tratar de este disco va por ahí. Pero no lo planifico.
Contestando a tu pregunta: no lo sé. A lo mejor sí, a lo mejor no, a lo mejor me apetece hacer un disco solo con vientos. Todavía es muy pronto y ahora estoy disfrutando de este disco y de la gira, que es al final el objetivo principal. Falta mucho hasta que yo me plantee por dónde voy a tirar.
-Aparece en este disco como productor, junto a Jose Nortés, pero a diferencia de '¿Revolución?' ya no está Toni Brunet como productor. ¿Cómo ha sido este proceso de producción respecto a otros discos? ¿En qué nota o ha querido poner la diferencia?
-Ha habido una decisión, que sí que ha sido planificada, de no meter arreglos sinfónicos. Parece que no hacer algo no forma parte de un plan, simplemente no lo haces, pero en este caso creo que ha sido determinante tomar la decisión de no meter un solo arreglo de cuerda. Habíamos trabajado mucho en este sentido en discos anteriores y ha sido determinante en este disco.
Me ha obligado a componer de una determinada manera y a plantear la producción enfocada a una banda de rock generando clima, generando sonido y distintas capas con guitarras, teclados, con lo que tuviéramos a mano en el local. En los discos anteriores teníamos que trabajar pensando en lo que iba a traer Miguel [su hermano] el arreglista. Aquí no, aquí sabíamos que lo que sonase en el local, a excepción de algún recording o algún detalle, era lo que iba a sonar en el disco.
Luego estaba muy presente la sorpresa, la improvisación, no fijar casi nada. De hecho, nos pasó una cosa muy bonita y muy creativa y es que ensayábamos y al día siguiente no nos acordábamos de lo que habíamos hecho el día anterior porque estábamos dejándonos llevar por los impulsos y por la creatividad y por la búsqueda de la sorpresa. Eso ha estado presente en el disco y ha sido un poco el espíritu de la producción.
-¿Se ha sentido cómodo con esta forma de producir y grabar?
-Mucho. Muchísimo. De hecho, no sé si cómodo es la palabra porque se trataba un poco de huir de la comodidad, pero sí que me he sentido excitado y entusiasmado. He visto a los músicos cómo se entusiasmaron, cómo sentían que yo les dejaba improvisar, no repetir las cosas ni fijarlas y eso les hacía sentir muy vivos como músicos y muy responsables del resultado final.
-Esa atmósfera y ese ambiente que se ha creado en el disco, según ha mencionado en otras entrevistas, tiene referencias de The Smile, Radiohead y Thom Yorke pero no como referentes directos sino en esa forma de componer, de crear una atmósfera que a veces parte de lugares oscuros pero es potente, enérgica y termina en luz.
-Absolutamente. Creo que esa es una muy buena definición de cuál ha sido la influencia de The Smile. No creo que escuches el disco y pienses guau, cómo suena a Radiohead, pero sí que tiene esa filosofía. Esa forma de partir de ideas oscuras, tenebrosas y tristes y generar algo muy vital, enérgico y luminoso, creo que esa es la esencia de lo que hemos intentado imitar o lo que nos ha influido de Radiohead y The Smile.
-Este disco tiene un sonido, una estética muy concreta que surge de ese ambiente creativo casi impulsivo que ha tenido que encajar en el directo, ¿cómo ha sido ese trabajo? ¿Hay aire para la improvisación y ese espíritu de jam session?
-Sí, sí. Digamos que estamos encerrados en una estructura, pero nosotros estamos improvisando. No nos salimos de la habitación porque entonces no habría show, no habría concierto, pero dentro de esa habitación improvisamos todo el rato, sobre todo en determinadas canciones y en determinadas canciones, como en 'Baila la oscuridad', 'Dragón' o incluso 'Como los gatos salvajes', que es una canción muy clásica. Pero sí, sí, hay mucha improvisación.
Ha sido más difícil de lo que pensaba. Recuerdo que cuando trasladamos 'El último hombre en la tierra' iba a ser durísimo no tener los arreglos sinfónicos y fue complicado pero menos de lo que pensábamos y este al revés. Pensábamos que iba a ser sencillo al ser un disco de banda, pero ha tenido su complicación porque es un disco de banda con muchas capas, con muchos climas. Metimos muchas capas de guitarras y trasladar todo ese paisaje, esa profundidad de campo, al directo, con cinco músicos, tiene su complicación, pero lo hemos conseguido de sobra. Hay un clima en el escenario brutal, una energía muy bestia.
-¿Qué siente que ha cambiado en usted, como músico, cantante y compositor, como artista en general, tras esta grabación y en esta gira? Algo que, por ejemplo, pueda quedar como poso para futuros discos y proyectos.
Creo que la constatación de que saliendo de la zona de confort, esa frase tan topicaza pero que explica muy bien el ejercicio que hemos hecho en este disco, y que arriesgando y metiéndonos en terrenos desconocidos, incluso sintiéndonos inseguros, con todo ello los resultados han sido espectaculares y positivos. Eso te da seguridad y confianza para volverlo a hacer y para ir más allá todavía en el siguiente disco. Igual no te sale, porque arriesgar no te asegura que vas a encontrar algo bueno, ¿no? Pero por lo menos te asegura que te lo vas a pasar bien y que no te vas a aburrir.
-Y se nota que lo estáis pasando bien.
-Mucho. Mucho. Lo hemos pasado increíble. Hacía tiempo que no me lo pasaba tan bien en una grabación y en un proceso creativo. En el escenario está siendo brutal, la mejor gira sin duda.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete