Premios Oscar 2010

El film trata de mostrar situaciones al límite en tono semidocumental, con un brío visual de alta graduación y una eficacia demoledora.

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'En tierra hostil' se convierte así en una película física donde las haya, que incluye secuencias de la más pura acción, dura y sin concesiones a la galería, capaz de mostrar la crueldad de la guerra como fruto de la debilidad y necedad de los pueblos

Al igual que la galardonada 'Redacted', de Brian De Palma, 'En tierra hostil' muestra la Guerra de Irak bajo la batuta directiva de la inteligente realizadora Kathryn Bigelow, de la que tan grato recuerdo atesora este crítico durante su paso por el Festival de San Sebastián en el año 2000.

La bella cineasta filma a ras de suelo el conflicto bélico iraquí, desde el punto de vista de toda una serie de artificieros yanquis expertos en desactivar bombas-trampa, que produce una constante tensión entre los miembros del equipo encargados de tan peligrosa misión. Lo cual da paso a un filme de hazañas bélicas, tratado de forma distinta a lo habitual, poniendo el acento en la angustia experimentada por esos arti ficieros, convertidos en antihéroes con todas sus consecuencias.

Nada de psicología barata en la descripición de los esta dos de ánimo de los protagonistas, nada de ribetes sentimentaloides en lo tocante a las motivaciones personales de los arriesgados protagonistas, nada de falsa modestia, ni tampoco de delirios de grandeza en la consecución de sus fines, nada de reflexiones políticas, moralistas o ideológicas. De lo que se trata aquí es de mostrar situaciones al límite en tono semidocumental, con un brío visual de alta graduación y una eficacia demoledora.

'En tierra hostil' se convierte así en una película física donde las haya, que incluye secuencias de la más pura acción, dura y sin concesiones a la galería, capaz de mostrar la crueldad de la guerra como fruto de la debilidad y necedad de los pueblos. Y lo hace con una garra, una inmediatez y una vibración humana que dicen mucho en favor de su autora. Así pues, algunas de las misiones encomendadas a este escuadrón en las afueras del infierno en que se ha convertido la legendaria ciudad de Bagdad (patria del singular polímata Abdul Latif al-Bagdafi), producen verdadero impacto, sin que jamás resulten falsas o gratuitas, por mor de un conflicto bélico, donde sobrevivir es la única gloria posible.