«La cuenta atrás ha comenzado, cada vez nos queda menos para estar bajo estos focos, solo nos quedan 30 programas», decía una voz en off nada más empezar 'Sálvame', mientras el equipo del programa aparecía de pie en el centro del plató. «Queremos ayudaros a encontrar una nueva ocupación. Hemos creado 'Sálvame Agencia de Reocupación'», ironizaba el locutor, que directamente mandaba al programa a la primera pausa publicitaria, emitiendo primeramente un cebo con la entrevista de Bertín Osborne a Jesulín de Ubrique, dejando entrever que Belén Estaban se encontraba molesta por algo que había dicho el diestro. «A alguien más se le atraganta la entrevista. La respuesta de Belén tras ser borrada de la vida de Jesulín», decía el narrador en el misterioso vídeo.
El mismo cebo se mostró a la vuelta de la publicidad y nada más entrar las cámaras al estudio de 'Sálvame', Belén Esteban quiso hablar, interrumpiendo a las presentadoras del programa. «Quiero decir una cosa. Estoy enfadada», señalaba la colaboradora que indicaba que había algo del vídeo que no le había gustado.
En ese momento, Terelu Campos anunció que primero iban a ver el vídeo. «Ah, bueno», dijo Belén Esteban creyendo como todos los telespectadores que iban a dar paso al corte que tenían preparado. Sin embargo, no fue así, y el vídeo al que se refería la presentadora de 'Sálvame' era otro de otro asunto completamente diferente.
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«O sea nada», espetó Belén Esteban muy indignada por lo que le habían hecho los responsables del espacio de Telecinco. Tal cabreo pilló la colaboradora de 'Sálvame' que, sin darse cuenta de que el micrófono la iba a captar, se lamentó de la censura que le acababa de hacer en pleno directo el espacio: «No puedo hablar, acojonante».
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