Fue así que ese camino de baldosas amarillas que pareció llevar a este equipo a «la primera división» de la televisión, como ellos mismos afirmaron sentirse, se precipitó antes de tiempo. De hecho, estuvo apenas un mes en la parrilla y se despidieron con un sabor agridulce. Tras el fracaso, el silencio y las vacaciones de verano, hasta que ahora María Patiño se ha manifestado sobre cómo se ha sentido en este tiempo. La periodista ha hablado alto y claro, como es marca de la casa, y ha afirmado: «He estado muy en tensión. Creo que es la etapa que menos he disfrutado profesionalmente».
Pese a todo, no guarda rencor a sus 'ex jefes'. De hecho, ha tenido palabras de gratitud para Televisión Española, hacia la que se siente «muy agradecida». De hecho, le ha mandado una indirecta muy clara: «No llegaría a afirmar que la relación con Televisión Española haya terminado para siempre».
Estas declaraciones de María Patiño las ha realizado en el podcast Perreando y en redes sociales han mostrado algunos de los momentos más interesantes de la participación de la que fuera maestra de ceremonias de 'La familia de la tele'. Ha participado con su perra, Beige, una Jack Russell que llegó a su vida siendo una cachorra. Con ella a su lado ha regalado otras confesiones a tener en cuenta sobre esa reciente etapa frustrada de su carrera: «Siempre que me meto en un proyecto es porque quiero que funcione, por soy súper consciente cuando veo que algo es bueno o malo. Porque eso se palpa, lo notas.
Mirando al futuro, María Patiño tiene claro el programa ideal para ella: «Me gustaría algo muy golfo y entrevistar a gente muy golfa». Lo afirma tras toda una vida dedicada a la televisión, una pasión que le ha costado «tener muy pocas relaciones estables y pasar muy poco tiempo con mi hijo». «No me arrepiento, porque ya eso de nada sirve», ha terminado diciendo.
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