Llantos, reproches, una huida y muchos memes: el culebronesco reencuentro de Montoya y Anita tres meses después

El reencuentro entre los tres en Honduras tiene visos de ser «explosivo», tal y como lo calificó Sandra Barneda, pero todavía quedaba en el aire el epílogo de 'La isla de las tentaciones'. Este lunes 10 de marzo, antes de volver a verse las caras en 'Supervivientes', las parejas de la octava edición se reunían de nuevo, tres meses después de la hoguera final, para actualizar su situación.

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Tras su tensa despedida en República Dominicana en la que la pareja ponía fin a su relación, continuó el intercambio de reproches y de insultos en el trío amoroso. Eso sí, la audiencia se había perdido varios capítulos de la historia. Y es que Montoya y Anita retomaron su relación después de la hoguera final. «Hago la maleta y me voy a Barcelona», desveló el andaluz. Sin embargo, los celos y las inseguridades de él acabaron por dinamitarla. Para colmo, la catalana pasó unos días en la Ciudad Condal con Manuel. «Esto no es ‘El Diario de Noa’, es 'El Diario de la Canoa'», espetaba el concursante de 'Supervivientes'.

Así, el trío llegó al reencuentro con la escopeta cargada. Sobre todo Manuel y Montoya, que reanudaron su guerra nada más cruzarse. La causa: las llamativas pintas del tentador, que al sevillano le recordaron a Freddy Mercury, aunque en realidad iba por otro derroteros. «Los toreros profesionales nos vestimos cuando hay que hacerlo. Le he dado muchos capotazos y ahora es momento de la estocada final», dejaba caer el gaditano justo antes de enzarzarse con su rival.

Ni los intentos de Anita por calmarlos lograron rebajar la tensión entre ellos. Tanto es así que el de Utrera quiso abandonar la villa donde se estaba grabando el reencuentro al enterarse por boca del soltero de que la catalana jugaba a dos bandas después de acabar 'La isla de las tentaciones'. «Esto es lamentable. Se acabó, me voy. Ahí ves lo que te importo»,

Y es que si el paso del tiempo había avivado todavía más la enemistad entre los dos andaluces, menos aplacó el intercambio de dolorosos reproches entre la por ahora ex pareja. Ambos acabaron llorando a mares; ella porque intentó hasta el final una reconciliación que no llegó, y él por ser incapaz de perdonarla por lo que considera una enorme decepción.

«Me avergüenzo de todo lo que ha pasado en la isla», reconocía una desconsolada Anita, que le acabó suplicando a Montoya volver con él. «Siempre has sido mi prioridad. No me veo una vida que no sea a su lado», declaró la catalana. «Eres el amor de mi vida, pero te acuestas con él. Mi cabeza vuelve a revivir todo, necesito reflexionar», le contestaba este también entre lágrimas. Finalmente y aunque admitía seguir enamorado de su ex novia, decidía irse solo. No obstante, no descartó del todo que en algún momento volvieran a estar juntos. «En estos momentos quiero estar conmigo mismo».