Sora y el fin del mundo conocido
Para qué va a querer una IA engendrar un personaje como Lladós o como Georgina
Las claves de Sora, la nueva IA para hacer vídeos en segundos a partir de texto

El fin del mundo se asoma en cada cambio disruptivo, en cada invento que amenaza con finiquitar lo viejo; pero tras el rugido inicial, el pasado regresa vestido de seda. El viernes, mientras Ramón Espinar –uno de los cerebros que venían a finiquitar la vieja ... política– tertulianeaba en Cuatro de lo que le echaran a la mesa, guionistas y directores de la televisión y el cine temblaban al ver lo que la nueva inteligencia artificial de OpenAI (llamada Sora) podía hacer. Prometen una tecnología a la que le pides un vídeo de una mujer paseando por la noche de Tokio bajo la lluvia y que te devuelve, en un segundo, una escena que hubiera costado varios días y miles de euros rodar. Pasaremos de leer en los créditos eso de que «ningún animal ha sufrido en este rodaje» a «ningún humano tuvo que trabajar en este rodaje».
No estaría tan mal. Lo malo sería ver qué hacen los trabajadores con todo el tiempo libre que van a tener. Tal vez podrían dedicarse a descubrir si lo que vemos en pantalla es real o artificial. Porque ya hay «personas» en anuncios y portadas de libros que en realidad no existen. De momento es fácil: hay algo inefable que hace que el ojo humano sospeche. Cambiará. Con los primeros efectos especiales todo cantaba y ahora todo está tan conseguido que se ruedan películas enteras en un plató y parece que están en exteriores. Lo bueno, o eso dicen, es que las ideas originales nunca podrán ser extraídas del mundo de las musas por un ordenador. Tampoco parece que tengan la capacidad de inventarse a los nuevos héroes de las pantallas.
La pregunta sería: ¿Querría un ordenador hacerlo? Para qué va a querer una IA engendrar un personaje como Lladós o como Georgina. Lo dijo FacuDíaz: una inteligencia artificial no es tan tonta como para imaginar a un tipo vestido en crocs y con la visera para atrás encarándose a un ciervo (como hizo Frank Cuesta) ni congelando la basura para seguir jugando a un videojuego (pregunten a su hijo quién es Xokas y, acto seguido, quítenle Twitch).
Total, que ya no se distinguirán las escenas que «ruede» la inteligencia artificial pero nos tendremos que comer la inteligencia natural de los «influencers» que dicen que por hacer burpees te haces millonario. ¿Podrá un personaje creado por IA actuar como Meryl Streep? Cuestión de un ajuste del algoritmo. ¿Dirigir como Lanthimos? Prompt: ojo de pez. Y a ser todos panzas mileuristas viendo a Lladós en Youtube.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete