David Broncano se estrena en 'La revuelta' con una lluvia de zascas y un guiño a Pablo Motos: «No me ha puesto Pedro Sánchez»

Pocos detalles se conocían hasta el momento del propio estreno sobre el 'spin-off' de 'La resistencia', salvo la intención de mantener la esencia del espacio de Movistar+. Ni siquiera la identidad del primer invitado, que resultaba ser el surfista Aitor Francesena, cinco veces campeón del mundo.

«Por primera vez desde el teatro Príncipe de Gran Vía. 'La re…'. 'La res…nada' ¡ 'La revuelta', con David Broncano!», así arrancaba el nuevo programa de TVE, haciendo además toda una declaración de intenciones en las que reiteraba que en él los espectadores encontrarían, ni más ni menos, que «la misma mierda, pero con otro nombre».

Con el mismo tono canalla y transgresor de 'La resistencia', Broncano encadenaba una pulla tras otra cargando las tintas con su humor ácido de siempre. «He estado a punto de romper España, cuando aquí es lo contrario de lo que se va a hacer», tiraba ante la presencia de una bandera de España en respuesta a los 'haters' nada más poner un pie en el escenario/plató del formato.

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También antes de comenzar con la entrevista, el presentador de 'La revuelta' se puso algo más serio, aunque sin perder el sentido del humor, con la intención de desmentir los bulos difundidos contra él y su programa desde que se anunciara su fichaje con RTVE. «Se han dicho muchas cosas que no son verdad durante estos días», aseguraba visiblemente molesto. Así pues, decidía aclarar «tres cosas muy básicas». «No me ha puesto Pedro Sánchez aquí, como si fuese yo su primo tonto del pueblo... Esto no ha pasado, no me hacía falta», afirmaba en primer lugar.

Dejaba claro, igualmente, que él no cobra los 14 millones de euros de los que tanto se ha hablado. «Lo he intentado, pero no es verdad. Hay que pagar a mucha gente, tenemos que hacer 160 programas…», matizaba Broncano. Y por último, desmentía que esos 14 millones de euros que cuesta 'La revuelta' salgan «de los enfermos de nada, ni de la Guardia Civil, eso no funciona así». «Toda la gente que piense que hemos venido a hacer propaganda del Gobierno y de Pedro Sánchez no nos conoce, ni ha visto un puto programa nunca», aseveraba el humorista.

Grison añadía otro chute de vacile a todas las especulaciones, empezando por aquellas que afirmaban que 'La revuelta' sería un formato de rollo político e inclinado a favorecer a la izquierda. «¿Me estás diciendo en serio que no le vamos a lavar el cerebro a la gente? Yo pensé que al final del programa la mitad serían gais y la otra mitad, menas», bromeaba, mostrando en el pecho un tatuaje del presidente del Gobierno y otro de Pablo Motos. «Uno es por justificar el sueldo de este mes y el otro para asegurarme el trabajo del año que viene».

Una vez más, Broncano repetía que la esencia del formato es otra bien distinta. Igual que en 'La resistencia', «vamos a contar chistes y a tocar el bombo».