'Ni que fuéramos' tenía un programa por delante en el que el 'culebrón' de 'La Oreja de Van Gogh' iba a ser el asunto principal de la emisión. Sin embargo, el 'momento cocina' de Belén Esteban eclipsó por unos instantes la 'guerra' entre Amaia Montero y Leire Martínez.
Todo ocurría cuando Belén Esteban limpiaba el frigorífico de 'Ni que fuéramos' de productos que estaban caducados. «¡Cómo vamos a comer yogures caducados!», se quejaba la colaboradora del nuevo 'Sálvame', mientras sacaba otros alimentos de la nevera con los que se negaba a cocinar.
María Patiño insistía que a los yogures no les pasaba nada y Belén Esteban se cabreaba con ella en un surrealista momento. Entonces, Javier de Hoyos, periodista de 'Ni que fuéramos' llamó a un experto para ver si se podía comer el yogur «15 días después» de su fecha de caducidad y tras el intento fallido de contactar con este, la tertuliana se sinceró con una inesperada revelación.
«Mira, el bote de tomate que he tirado, no es por nada, porque es verdad que la comida no hay que tirarla, pero, yo voy a contar una cosa. Yo una vez me intoxiqué con comida, con tomate, y cuando he visto el bote de tomate con albahaca ahí...», empezaba contando Belén Esteban a sus compañeros que se quedaban enmudecidos ante la historia que relataba la de Paracuellos.
['Vamos a ver', obligado a finalizar un directo por amenazas a su reportera: «Como me vea en la tele...»]
«Pues, que me puse que no te imaginas lo que llegué a vomitar, pero vomitar así, estuve un día, tuve vómito de escopeta que es así», narraba Belén Esteban que con las manos hacía el gesto de que era un vómito incontrolable.
Entonces, Lydia Lozano pudo contactar con el doctor Céspedes que les dio vía libre para comerse el yogur ante las cámaras de 'Ni que fuéramos', pero Belén Esteban se negó a ingerir el producto.
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