La caída a los infiernos de Nahuel: de ganar OT a terminar de «stripper» en Paraguay

Sin embargo, Operación Triunfo no es necesariamente sinónimo de éxito. Más allá de los mencionados en la primera edición y de otros talentos musicales (que no ganaron el concurso) como Nena Daconte, Manu Carrasco, Edurne, Pablo López, Soraya Arnelas o Rubén Noel (uno de los tres miembros de «Lérica»), lo cierto es la mayoría de los concursantes que triunfaron en el formato original de Gestmusic no han podido disfrutar de ese éxito en sus carreras.

Llama especialmente la atención el caso de los ganadores. Aparte de Rosa, el resto de vencedores de «OT», a excepción de Virginia Labuat («OT 6»), no han logrado hacerse un hueco en lo alto del panorama musical. Son los casos de Ainhoa, Vicente, Sergio Rivero , Lorena, Mario y Nahuel, el resto de vencedores del certamen y cuyos nombres dejaron de estar en liza hace ya bastante tiempo.

Uno de ellos, de hecho, ha saltado a la palestra, aunque no precisamente por sus dotes musicales. Se trata de Nahuel Sachak , el joven paraguayo que ganó «OT 8», la edición presentada en 2011 por Pilar Rubio y que Telecinco (cadena a la que se mudó el programa en 2005, tras «OT 3») terminó cancelando por sus pobres registros de audiencia. El canal de Mediaset decidió acortar considerablemente el programa y acabar con su emisión cuando aún había trece concursantes en la Academia. Así, Telecinco organizó una final relámpago improvisada que terminó llevándose Nahuel, que entonces tenía 19 años.

El joven recibió así un cheque por valor de 30.000 euros y la promesa de un futuro dentro de la industria. « Tendrás una carrera musical dentro de Blu:sens Music ; grabarás tus propias canciones; las presentarás junto a Paris Hilton; en verano te irás de gira con tu propia banda y en septiembre saldrá a la venta tu álbum, que será distribuido en las plataformas digitales y en los centros comerciales de más de 30 países», le dijo textualmente Eva Perales, directora de Blu:sens y jurado en «OT 8».

Sin embargo, todo fue papel mojado. Tiempo más tarde, el concursante confesó en una entrevista con «Interviú» que nunca cobró su premio. «En un día, “Operación Triunfo destrozó todos nuestros sueños y nuestro corazón » confesó antes de añadir que solo recibió «un mp4 con dos canciones» cantadas por él. «El programa nos dejó a la deriva. Allí, todo era de color de rosa, pero luego los perjudicados fuimos nosotros. Fue como quitarle un caramelo a un niño», señaló en octubre de 2016. Eva Perales, por su parte, le respondió. «Un artista se mide por su demanda. Él no la tenía y además se agobió con las rutinas y las maquinarias del mundo discográfico», explicó al citado medio.

Sin apoyo ninguno por parte del programa, Nahuel tuvo que buscarse la vida. El artista, que había comenzado en la música a los seis años, cuando cantaba con su padre en los autobuses de Paraguay para sacarse un dinero, buscó entonces nuevos registros. Se volvió a su Paraguay natal, pero se negó a renunciar a la música. Apareció en algunos programas de televisión locales e incluso lanzó su primer «single»: «En cualquier lugar», pero el éxito nunca le acompañó. Tampoco durante los dos años que se pasó cantando en cruceros por el Mediterráneo o los Fiordos Noruegos, exhibiendo su talento ante turistas en los barcos de turno.

Desesperado ante su situación y con una hija pequeña recién nacida, Nahuel tuvo que darle un nuevo giro a su vida. Comenzó, entonces, a participar en fiestas locales en las que, entre cumbias y reggaetón, también se quitaba la ropa y hacía espectáculos de striptease. Además, animaba a las mujeres a subirse al escenario para bailar con él y a que le tocasen el torso , como se puede apreciar en vídeos que difundió él mismo en su página oficial de Facebook.

Su nueva faceta pilló totalmente desprevenidos a todos sus fans (y a sus detractores), que no tardaron en criticarle a través de las redes sociales. «Merecemos una explicación», «No puede haber caído tan bajo» o «Ya nadie se acuerda de él» fueron algunos de los comentarios que pudieron leerse en Twitter y Facebook . «Está a tiempo de rectificar, él va para mucho más. Tiene una voz preciosa para baladas o para lo que quiera. Cualquiera canta ese estilo de música (si se le puede llamar así). El Ave Fénix resurge de sus cenizas, puede volver a estar donde estaba, pero ese no es su sitio. No puede caer a ese nivel», opinó por su parte una aficionada más amable.

Aunque Nahuel no se arrepintió de su nuevo registro. «No tengo problemas, para nada. El show vale la pena. La gente que critica tiene su derecho», declaró al medio local ABC Color , en el que, de hecho, agradeció todas las opiniones vertidas, alegando que significaba que sus seguidores seguían preocupándose por él. «Agradezco que a la gente le siga interesando. Es una buena señal de que aún existo en su vida».

La octava edición de Operación Triunfo fue la más floja de todas, en todos los niveles. Ahora, con Roberto Leal al frente y el nuevo giro que Televisión Española le ha dado al formato, el programa se ha revitalizado y ha cobrado más fuerza que nunca. A buen recaudo, los aficionados de «OT» rezan p orque Amaia de España no acabe como Nahuel . También es cierto, todo sea dicho, que nada tienen que ver la cultura y bagaje musical de la joven navarra con la del paraguayo.