Los mayores errores del Benidorm Fest: destripó las actuaciones antes de la gala y acabó de madrugada

Parece que Sharonne no aprendió la lección en 'Drag Race España' , concurso que ganó: nunca te quites la peluca para pillar desprevenido al personal. A nadie más se le cayó la peluca viendo una interpretación que, como inauguración, debía garantizar a los espectadores un buen espectáculo y, sobre todo, un buen programa de televisión. No lo fue. La primera semifinal del Benidorm Fest 2023 parecía la gala cero de 'Operación Triunfo', aunque de su realización, como hace un año, se encargue Boomerang, la productora de otro concurso musical, 'La voz'.

Sin embargo, hubo quien anoche echó de menos a Alaska y Máximo Huerta como presentadores del Benidorm Fest . Durante los primeros minutos de la primera semifinal, al filo de las once de la noche y antes de las nueve actuaciones, Mónica Naranjo (el principal reclamo de esta segunda edición, anunciado con meses de antelación), Rodrigo Vázquez e Inés Hernand (otra con peluca) se pisaban a la hora de explicar la mecánica del concurso que sirve como preselección del representante de España en Eurovisión. Hubiera teleprónter o no (se supone que no), Mónica Naranjo iba a trompicones como maestra de ceremonias. Si había cue, Mónica Naranjo lo lee peor que Paz Padilla.

La cantante sí tiene tablas en televisión, como presentadora ('La isla de las tentaciones') y como jueza ('Tu cara me suena'), pero se le quedó grande su papel en directo. A su compañero Rodrigo Vázquez , con quien derrochó más química durante la rueda de prensa en Madrid , también le jugaron una mala pasada los nervios del directo, aunque sus equivocaciones fueron anecdóticas . Él mismo, muy correcto y sonriente, bromeó con haber dicho 'abrido' en vez de 'abierto'. Gustará más o menos Máximo Huerta, pero el periodista, aunque agitadísimo, sí logró transmitir que aquello era un evento.

Quien más suelta y deslenguada se mostró fue Inés Hernand , la más joven y 'rebelde' de los tres presentadores (un trío extraño, todo sea dicho). Fue ella quien más bromeó (hubo referencia a los cuernos de Piqué a Shakira, «clara-mente») y más se movió por el estupendo plató que habían montado en el palacio de deportes de Benidorm.

Pero el gran error de la primera semifinal del Benidorm Fest 2023 , selección musical aparte, fue su programación. La gala no empezó hasta casi las 23.00 horas para así no competir con 'El Hormiguero' . En la anterior edición, el espacio empezaba en torno a las diez de la noche y solo en la final, que coronó a Chanel, sobrepasó las doce. Así, La 1 estaba empleando las tácticas de la televisión privada para inflar la cuota de pantalla, pues la primera semifinal acabó casi a la una de la mañana.

No ha hecho efecto, pues la primera semifinal del Benidorm Fest 2023 superó apenas el millón de espectadores (de media) y el 10% de 'share', o sea, medio millón de televidentes menos que el año pasado. Interés había, pues a las once de la noche había más de 1,3 millones de personas viendo La 1 (eso sin contar todos aquellos que se conectaron a través de RTVE Play). Sin embargo, a partir de medianoche, la audiencia se desplomó.

El error no quedó ahí, pues TVE decidió que era buena idea programar un espacio previo de casi una hora tras el Telediario y antes de la gala. Acertó con los presentadores (un Aitor Albizua más juguetón y cómodo que Rodrigo Vázquez; un Miki Núñez con suficientes tablas televisivas tras copresentar 'Eufòria', una suerte de 'Operación Triunfo' catalán), pero el espacio, más que calentar motores, fue un jarro de agua fría, pues mostró imágenes de los ensayos de esa misma tarde, rompiendo así la magia y el factor sorpresa.

La buena noticia para TVE es que atrae con el Benidorm Fest , aunque sea solo por tres noches, a una audiencia cada vez más desconectada de la televisión tradicional: los adolescentes y jóvenes. La primera semifinal logró un 16,5% entre aquellos de 13 a 24 años y un 18,4% entre aquellos de 25 a 44.