Bibiana Fernández comete un despiste surrealista y su ingeniosa excusa provoca el cachondeo de los jueces

Así pues, tras la despedida de José Corbacho en la gala anterior, las ocho 'celebrities' restantes han continuado su aventura en 'MasterChef Especial Navidad' enfrentándose a dos pruebas muy en sintonía con las fiestas. En la primera, los aspirantes inventaron un plato libre navideño, dulce o salado, con los productos conseguidos jugando a Master-Enredos, una versión culinaria del 'Twister' donde los ingredientes de cada aspirante dependieron del azar, la habilidad física y la flexibilidad de cada uno. O como lo definió Bibiana Fernández , «un tocanarices».

Sobre todo para Anabel Alonso , que en una jugada del destino se vio obligada a limpiar una dorada. La tarea entristeció a la actriz, pues le recordó a su querida Dory , el desmemoriado personaje de 'Buscando a Nemo' que dobló.

También sudó la gota gorda Carmina Barrios para conseguir los ingredientes. «Ya he perdido la olla total», manifestó la concursante más querida de 'MasterChef Celebrity 6' . La madre de Paco León dejó patidifusos a los jueces cuando reveló cómo celebran en su casa las fiestas. «Nos juntamos 50. Hacemos como un buffet. Uno trae el besugo al horno, otro los redondos de carne rellenos. Y yo siempre hago una olla con cabrito», contó la sevillana. Pero además de mucha comida, hay otra cosa que no puede faltar en sus multitudinarias reuniones. «Mucho cante y mucho baile, hasta caerte al suelo».

Cada concursante contaba con una ventaja o desventaja echada al azar. Boris Izaguirre , el peor parado, acabó con la responsabilidad extra de ayudar a todos sus compañeros. Suerte que contó con Aurora , su pequeña ayudante. Toda una ganadora que sabiamente tomó las riendas del plato. Entre buen rollo pasó el cocinado, donde reinó el buen 'feeling' entre los adultos y los 'juniors'. Con una excepción: Javier y Florentino Fernández , quien tuvo que lidiar con el carácter indomable de su mini pinche .

Con todo y con eso, el humorista logró que su empanada salada con presa ibérica destacara por encima del resto. Solo lo superó el 'magret de pato no binario' de Cayetana Guillén Cuervo . La duelista de la primera edición del 'Celebrity ' hizo un tándem perfecto con Olivia. Además, presentó su plato añadiendo un emotivo mensaje sobre 'abrazar la diferencia con todo el amor y el respeto'. Por ser la mejor de la prueba pudo donar los 2.500 euros del premio a Mensajeros de la Paz, organización con la que la actriz colabora habitualmente.

Carmina, Anabel, Bibiana y la Terremoto de Alcorcó n, en cambio, acabaron colgándose el delantal negro que los jueces otorgaban a los peores de la prueba. «Estamos aquí por guapas; nos tienen envidia», espetó una resignada Fernández, a lo que Alonso agregó una apreciación. «Por eso nos gustan más los Reyes Magos».

Las 'cuatro aspirantes más reinas' acabaron en eliminación. En la cuerda floja se encontraron con un espectacular portal de Belén decorado con algunos elementos comestibles por el maestro chocolatero David Pallás . El invitado las desafió a replicar una de las cuatro figuras dulces escondidas en el nacimiento: un conejo, un tronco, un cofre de mirra y una manzana.

Bajo la supervisión de Paz Vega y Santiago Segura , aspirantes mal avenidos de 'MasterChef Celebrity 3 ' y dos de los artífices de 'A todo tren 2' , Cayetana Guillén Cuervo tuvo que repartir las elaboraciones entre sus compañeras. El conejo se lo dio a Carmina «porque la he visto triste desde que ha llegado», mientras que le concedió a Bibiana el más fácil, el tronco, y el cofre a la Terremoto de Alcorcón . Y confiando en su capacidad de organización, la manzana 'envenenada' fue a parar a Anabe l.

Carmina sacó fuerzas de donde no las tenía y sacó un conejo «de 10». ' Terre ' y Anabel avanzaban más o menos confiadas y esa seguridad se reflejó en el resultado.

Quien desde el principio trabajó sin saber muy bien lo que hacía fue Bibiana , cuya expulsión se fue fraguando sin demasiado misterio. Ni los consejos del invitado solventaron la sucesión de despistes irreversibles que fue cometiendo: intentó derretir el chocolate en agua en vez de al baño María, mezcló los ingredientes en el abatidor sin tener en cuenta los tiempos, y para rematar, no quitó el molde para pintar el dulce con el aerógrafo… Ella misma lo reconoció. «La rubia está más perdida que el barco del arroz», aunque se jactó de que por fuera le había quedado muy bonito.

El cachondeo entre jueces e invitados fue instantáneo. «Tronco con molde. Eso va a superar el pichón con plumas», bromeó Santiago Segura haciendo referencia al pájaro muerto que presentó Saray   .

La actriz no se dio ni cuenta hasta que se lo señalaron en la cata. Eso sí, salió muy bien del paso tomándoselo con humor. «Yo soy muy aficionada a la silicona, siempre he estado a favor. Ahora ya era muy tarde para renunciar», proclamó. La otra 'retal', Anabel , también intervino para echarle un cable. «La culpa es de David por darle un molde tan parecido al chocolate, era ir a pillar».