Joan Manel Serrat se enfunda el delantal, pero da unas categóricas calabazas al 'Celebrity'

Para empezar la gala 4, los aspirantes se han enfrentado a una caja misteriosa que escondía nueve ingredientes que han recibido un homenaje en las ediciones anteriores del ‘talent’. Exactamente, el reto ha consistido en cocinar un plato con, al menos, seis de los ellos, añadiéndoles además un ‘novel food’.

Como han explicado los jueces, este concepto engloba simple y llanamente nuevos alimentos (o alimentos del futuro), que no se consumían en Europa antes de 1997, se elaboran mediante un procedimiento que no se ha utilizado previamente, o a partir de ingredientes o materias primas nuevas. Okra, verdolaga, enoki, ube morado, maitake y nopales son algunos ejemplos.

Solo Patricia se ha atrevido a verbalizar el sentir general de la audiencia y de esos compañeros en esos momentos: «Me suena a chino todo». Viendo la cara de susto general entre los concursantes, los chefs Oriol Castro y Mateu Casañas (3 soles Repsol) han traído un plato para demostrar que no es imposible. Por tratarse del 10º aniversario del programa , han animado a los alumnos a esmerarse contundentemente ofreciéndoles una suculenta recompensa: tres pines de la inmunidad.

Con sus platos han tenido que conquistar no solo al jurado, también los exigentes paladares de Carla, Olivia y Alexia , de ‘ MasterChef Junior 9’ ; Aurora , ganadora de ‘MasterChef Junior 8’ ; Lu , ganadora de ‘MasterChef Junior 7’ ; y Albert , de ‘MasterChef Junior 7’.

Sin embargo, cuando los jueces de ‘MasterChef’ se ponen espléndidos es mejor que los aspirantes se anden con bastante ojo. Aunque esta vez por lo menos han avisado previamente. «El que haga el peor plato, será expulsado».

María Lo ha superado el desafío gracias a unos raviolis resultones que les han sabido «buenísimos».Igual que David , cuyo ‘Reme’ «está todo rico», según Pepe Rodriguez . No así Jokin, quien ha acumulado varios fallos en su guisado de rabo de toro y rape.

Patricia ha presentado un ‘falso mar y montaña extraterrestre’, que a la postre ha resultado ser para Jordi Cruz «un guiso de rabo de toro que no dice nada».

A Claudia le cae bronca por cargarse su rape. «Tu plato es malísimo», ha afirmado Cruz. Luismi , contra todo pronóstico para el jurado, se ha salvado de la quema a pesar del batiburrillo de ingredientes que ha hecho. El bombero ha incorporado hormigas en una tortita que bañada en chocolate.

«Le falta pensamiento, orden, pero es correcto», ha comentado Pepe sobre el de Teresa . Acto seguido ha valorado mucho más duramente el mar y montaña seco de Iván . «No se puede hacer peor».

La que ha recibido más flores ha sido Verónica , cuyo plato ha sido calificado como de alta cocina. «Es un plato con la proporción justa, belleza y que está rico».

Las creaciones de Julia, Adrián, Yannick, Eva , los aspirantes que han cerrado la cata, han dejado tibios a los chefs.

Por lo tanto, solo tres aspirantes han estado a la altura de recibir el pin de la inmunidad. Jordi se lo ha concedido a Verónica por haber logrado un plato «coherente, con sentido y bien ejecutado». Pepe, por su parte, se lo ha otorgado a una aspirante que «ha tenido una buena idea, ha trabajado mucho para llevarla a cano y la ha ejecutado com éxito»: María Lo .

Samantha le ha concedido el último salvavidas a David porque «ha llegado con ganas de cocinar, se ha enfocado en su plato y se ha notado mucho en el resultado».

Unos han celebrado el éxito y otros han sufrido en la cuerda floja hasta conocer el aspirante que no continúa en las cocinas de ‘MasterChef’. Hay para elegir, pero el escogido es Iván .

«Hay que asumir la derrota, me pierdo esta experiencia. Ha sido un orgullo estar dentro de la décima edición. Creo que no he dado lo mejor de mí, pero son cosas que pasan», ha confesado antes de irse.

Después, en la prueba de exteriores, ‘MasterChef’ ha querido sumarse a los millones de voluntarios de Médicos Sin Fronteras para celebrar el 50º aniversario de la ONG, que ofrece asistencia médica y ayuda humanitaria en los lugares más devastados del planeta. Los aspirantes han cocinado para 100 personas, que representarán a los más de 50.000 trabajadores y seis millones de socios con los que cuenta la organización no gubernamental en todo el mundo.

En el reto han elaborado dos menús internacionales: el equipo azul, formado por Verónica, Paula, Eva, Luismi, Adrián, Claudia y Yannick ha teletransportados a los comensales hasta Líbano, de la mano del chef Basem Alawartany . María Lo, Teresa, Julia, Patricia, Jokin y David , luciendo los delantales rojos, han recorrido la gastronomía de Sudáfrica junto al chef J an Hendrik van der Westhuizen (1 estrella Michelin).

Así, por primera vez en la historia de ‘MasterChef’ , los aspirantes han trabajado a las órdenes de dos chefs internacionales. Una decisión que han celebrado hasta conocer que solo podrían comunicarse con ellos en sus lenguas maternas: árabe y afrikáans, respectivamente.

Los aspirantes se han entendido de aquella manera con sus capitanes. Hendrik le ha recriminado a María Lo su afán por mandar. En tanto, en el equipo azul, Luismi es el que más he hecho por entenderse con Basem Alarwartany, que le ha elegido como su mano derecha.

Pero pasado un rato, los jueces han dejado a los concursantes apañárselas solos. Los roces han comenzado pronto a aflorar… hasta que ha aparecido el único e inigualable Joan Manuel Serrat , socio y colaborador de Médicos Sin Fronteras desde hace 40 años.

El legendario cantautor no solo ha visitado a los aspirantes durante el cocinado y ha puesto en valor la encomiable labor de la ONG, también se ha enfundado el delantal para echarles una mano. En ese momento Samantha ha intentado captarlo para ‘MasterChef Celebrity’ ; no obstante, el artista ha sido tajante y conciso. «No, porque sería un abuso».

Julia , fan   entusiasta del músico, le ha rogado que cante. Serrat ha deleitado a todos con 'Mediterráneo'.

Poco después el artista se ha sentado con los comensales para degustar los platos. Tanto él como los demás cooperantes de Médicos Sin Fronteras han dado buena cuenta del menú, sin ponerles muchas pegas.

A la hora de la valoración, el jurado a criticado la actitud de sobradas de María Lo y Verónica . «Sin tener el control de tu plato, te tomabas la licencia de opinar sobre las elaboraciones de los demás», ha esgrimido Pepe.

En cuanto al resto de los aspirantes, el chef de Illescas ha informado de que «los dos equipos ganan, pero a la vez pierden». El resultado de los dos ha sido de notable, por lo tanto, el veredicto ha sido individual. A drián, Yannick, Luismi, Claudia, Patricia, Jokin y David han sido los mejores, con mención especial para el bombero. Con lo cual, Eva, Verónica, Paula, María Lo, Julia y Teresa han vuelto a las cocinas con sendos delantales negros.

De regreso al plató, el protagonista del último reto de la noche ha sido un ingrediente indispensable en la cocina occidental, que se utiliza para elaborar platos dulces y salados: la harina de trigo.

Las candidatas a la eliminación han replicado un plato básico de la cocina inglesa, el ‘yorkshire pudding with gravy and roast beef’, es decir, una mezcla entre pan y una masa ligera de bollería, parecido a un soufflé, con una textura mucho más tierna.

La actriz y cantante Belén López , finalista de ‘MasterChef Celebrity 6 ’, se ha puesto la chaquetilla para participar en el reto. María Lo y Verónica , a pesar de contar con la baza del pin de la inmunidad, también se han arriesgado y han salido victoriosas siendo las mejores de la prueba.

Los demás delantales negros, en cambio, parecen no comprender muy bien el inglés, ni tampoco haber salido del recetario español. Teresa , la primera en pasar por la degustación, ha presentado un plato que ni fu ni fa para el jurado. «No está mal, pero tampoco bien. Le falta seguridad a tu trabajo».

Julia parecía más segura durante el cocinado, pero no se ha manifestado esa confianza en el plato. «Te ha quedado seco y te estás quedando sin excusas. La guarnición es terrorífica, no hay salsa y la carne está dura», ha relatado Jordi . Por si fuera poco, ha confundido la ternera por el cerdo, al igual que Paula . «También te has equivocado con la carne. No hay salsa y el pudin está mal elaborado. Es una de las carnes más pasaditas que he probado aquí».

El plato de Eva ha traído de cabeza a Jokin , que bebe los vientos por ella. «Va mal, cuesta abajo y sin frenos, ha expresado preocupado el vasco desde la galería». Una crítica que Jordi ha confirmado al probarlo. «La salsa está grasa, el pudin está crudo, la carne también. Hace bola».

Con este panorama, Eva y Julia se han salvado por los pelos, gracias a que la elaboración de Paula les ha parecido todavía peor.

La despedida de la auxiliar de enfermería ha dejado a sus compañeros llorando a mares, aunque ella, a pesar de tener que decir adiós, ha agradecido la experiencia. «Haber entrado de 72.000 personas ya es un regalo. Me siento super contenta a por poder contar que ‘he entrado en ‘MasterChef’ ».