FesTVal de Vitoria
'La Liga de los hombres extraordinarios': cuando el fútbol se pagaba en pesetas y no tenía filtros
Movistar estrenará el lunes 19 esta serie documental de cinco capítulos, que retrata la España de hace 30 años
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Iniciar sesión«¡Me estoy muriendo por el Betis!». La primera frase que se escucha en el primer capítulo de 'La Liga de los hombres extraordinarios' la pronuncia Manuel Ruiz de Lopera , casi en trance. El ex presidente del Betis es uno de los protagonistas ... de la serie documental que Movistar Plus+ estrenará el 19 de septiembre. La plataforma logró reunir este viernes a otros tres ex dirigentes, Joan Gaspart , César Lendoiro y José María del Nido , que discutieron por videoconferencia en la presentación del programa en el FesTVal de Vitoria. De algún modo prendió la magia, sobre todo cuando se sumó el expresidente del Barça, Lendoiro avisó: «Cuidado con las carteras».
El gallego todavía no había perdonado del todo 'robo' de Rivaldo al Deportivo de La Coruña. Gaspart reconoció que aquello fue una «legalidad incorrecta» y el arquitecto del 'Superdépor' se mesaba los cabellos. Más aún, el ex presidente catalán se negó a apearse de otra burra: el fichaje de Figo , del que se ha estrenado en Netflix otro documental, sí fue una «ilegalidad incorrecta», en su opinión. Para compensar, Gaspart reconoce ahora que los lunes se pasaba media mañana «llamando a los contrincantes pidiéndoles disculpas», por su comportamiento el día anterior en palco.
Aquellos presidentes de cuando el fútbol se fumaba sin filtros y se pagaba en pesetas hicieron revivir a los presentes, muertos de risa, el espíritu de hace 30 años. Como dice el subtítulo de la serie, era «la España del pelotazo» , término válido dentro y fuera de los campos de fútbol. «No tengo tan claro si en esa época era todo más incorrecto», reflexiona Gaspart. «Los periodistas nos dicen que nos echan en falta muchísimo. Ahora todos los presidentes son amigos. El que más dinero tiene, más hace. Antes era mucho más divertido porque poníamos mucha pasión».
Los 90, de moda en Movistar
Tiene gracia, porque ayer Movistar presentó en Vitoria la serie 'El inmortal' , inspirada en el Madrid de los 90, donde la banda de 'Los Miami' campaba a sus anchas. Durante esos mismos años, en la cara A de la sociedad, a veces rozando el canto, llegó a la presidencia de los clubes de fútbol otra 'banda' muy distinta, que completa la radiografía de la década, empresarios que en muchos casos buscaban notoriedad, poder y dinero rápido. Fueron un anticipo del populismo. Para la televisión eran una mina.
«En determinados estadios porque ponías la cámara en el palco y había reportaje seguro», corrobora Mónica Marchante . «Era muy fácil. Eran más ídolos que el delantero centro del equipo. Hablaban en todas partes, antes y después de los partido», sin la protección actual de sus equipos de comunicación.
«Estamos hablando de unas personas con un carisma espectacular», asegura Carlos Martínez , narrador durante todo este tiempo del fútbol en España. «Eran capaces de hacer cosas que, vistas con la distancia, parecen absolutamente inverosímiles». Movistar ha buceado en su archivo documental y ha producido este programa con la colaboración Producciones del Barrio y Producciones del K.O. El espectador contemplará su ascenso y su caída, a veces dejando un rastro de deudas insalvables, y nos contará qué es ahora de sus vidas.
'La Liga de los hombres extraordinarios' se compone de cinco capítulos «que se comen como pipas», según Juan Andrés García Ropero 'Bropi' , director de Entretenimiento Movistar Plus+. El espectador verá a Jesús Gil , Ramón Mendoza , José María Ruiz Mateos , José María Caneda y otros exponentes de una época más libre y descontrolada. Algunos momentos son conocidos de sobra, como el puñetazo de Gil a Caneda, pero las imágenes están plagadas de perlas no tan conocidas, que asombrarán a los más jóvenes.
«Menos que me violen, yo por el Atlético de Madrid hago lo que haga falta», dice Gil en algún momento del primer capítulo. Tampoco está mal el simulacro grabado en el que Lopera rescata a su equipo con una simple llamada de teléfono: «Necesito 800 millones de pesetas en... veinte minutos», dice mirando el reloj de forma ostensible, 'ostentórea' incluso. «El Betis no puede morir, porque le daría una alegría a mucha gente.
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