Los familiares de Michael Jackson llevan el polémico documental de HBO a los juzgados

La denuncia de los herederos de Jackson, que piden una indemnización de hasta 88 millones de euros (100 millones de dólares), establece que los responsables del documental rompieron un contrato que firmaron con HBO en 1992 cuando participaron en el concierto «Michael Jackson in Concert in Bucharest: The Dangerous Tour». Un pacto que incluía no comentar nada de lo que vivieran junto a Jackson. Ese texto legal, según la demanda, también incluye presuntamente una condición por la cual HBO debería notificar y consultar a los herederos «si desea emitir programación adicional sobre Jackson». «Deben saber, contrariamente a las normas establecidas por cualquier realizador de documentales, que la familia de Jackson nunca fue advertida por Dan Reed (director de «Leaving Neverland») o ninguno de sus socios de la filmación de esta película. Nunca nos dieron la oportunidad de responder contra las mentiras que se cuentan en su narración. Tampoco nos han dado la oportunidad de contradecir con evidencias lo que ellos dicen y Dan Reed lo ha admitido públicamente», han explicado los Jackson en un comunicado a los medios.

La demanda también alega que las acusaciones de las supuestas víctimas de Jackson entrevistadas en «Leaving Neverland» están motivadas financieramente. Según el relato de la acusación, tanto Robson como Safechuck defendieron inicialmente a Jackson, negando que habían sido maltratados cuando eran niños, un hecho que el documental reconoce, aunque ambos hombres explican ampliamente sus motivos en pantalla. «Anteriormente declararon que Jackson nunca los tocó de manera inapropiada , de ninguna manera», afirman los demandantes. «Pero entre el 2013 y 2014 su situación financiera era desesperada y cambiaron sus historias». La única salida que la familia Jackson ha encontrado contra ellos es su debilidad económica, tratando de alimentar dudas aunque ninguno de los protagonistas ha recibido una recompensa económica por hablar en el documental.

En una declaración a la revista norteamericana «Variety», el abogado de la familia Jackson, Howard Weitzman, dijo: «HBO y el director Dan Reed eran conscientes de sus motivos financieros y de que existen numerosas fuentes opuestas sobre este tema, pero tomaron la desconsiderada decisión de enterrar cualquier evidencia que arrojara dudas sobre su narrativa. Si hubieran hecho una película objetiva, habrían permitido a los espectadores tomar sus propias decisiones sobre estas acusaciones, en lugar de que una cadena de televisión dicte el futuro de la imagen de Michael Jackson con una narración falsa».

Los abogados de HBO, conscientes de la gran controversia que está despertando el documental entre los seguidores del rey del pop, también han respondido con un comunicado a «Variety» insistiendo en que mantendrán inalterables sus planes de emisión para «Leaving Neverland». «A pesar de los esfuerzos desesperados por socavar la película, nuestros planes permanecen sin cambios. HBO seguirá con la emisión del documental de dos capítulos que se emitirá en dos partes el 3 y el 4 de marzo. Esto permitirá que todo el mundo tenga la oportunidad de evaluar la película y las reclamaciones de la misma», subrayan.

Antes de la demanda, tras su esterno en el Festival de Sundance, donde se proyectó rodeado de fuertes medidas de seguridad, el filme ya fue objeto de amenazas por parte de los herederos, que lo calificaron de «sensacionalista» y «poco objetivo».