Juanjo Ballesta, el niño prodigio del cine español que cambió la fama por un trabajo de marmolista: «Dije, 'hasta aquí hemos llegado'»

Ballesta dio una aplaudida lección de humildad y autenticidad protagonizando este domingo 26 de marzo la última entrevista de la cuarta temporada de 'Lo de Évole' , donde repasó su trayectoria de cabo a rabo. El actor se llevó a Jordi Évole de pesca y charlaron animadamente sobre episodios un tanto desconocidos de la vida del de Parla. Como la casualidad providencial que lo llevó a hacer carrera en el cine.

Antes de debutar en la película de Achero Mañas , Ballesta había participado en algún proyecto de publicidad. Quiso el destino que su madre se lo llevara a los castings a los que presentaba a su otra hija por miedo a que el chavalito hiciera alguna trastada con su hiperactividad. Lo cogieron para el anuncio de la vuelta al cole de El Corte Inglés.

Más adelante se le abrieron las puertas de la tele en 'Querido maestro', la serie de Imanol Arias y Emma Suárez. Y cuatro años después, una audición en la que tenía que insultar a la cámara le brindó el papel en ' El Bola' . La película supuso el comienzo de un éxito meteórico. El pequeño Juanjo creció en la gran pantalla mientras intentaba seguir haciendo una vida normal. Tras su primera película vinieron rodadas 'El embrujo de Shanghai' , 'Planta 4ª', 'El viaje de Carol' y ' 7 vírgenes' . Con esos filmes, sin embargo, terminó de descubrir que la fama es un arma de doble filo al experimentar en carne propia la locura del fenómeno fan.

A modo de prueba gráfica, el presentador sacó del baúl de los recuerdos la portada de una famosa revista de adolescentes. «Salir en la portada de la 'Superpop' era ser el puto amo», valoró Ballesta entre risas. «Es verdad que había muchas niñas que iban detrás mía», reconoció, aclarando no obstante que «el día que me dejaron de sacar, empecé a respirar porque no podía salir a la calle».

Al recibir la Concha de Plata que logró en la edición del Festival de San Sebastián de 2005 por '7 vírgenes', ya no resistió más. Sobrepasado por el 'boom' de la popularidad, el Justin Bieber español', como lo definió Évole, tomó una drástica decisión. «Pensaba que no iba a ser más actor. Me rayé y dije 'se acab ó'. Estaba un día en el parque llamando a un amigo mío y le dijeron si quería trabajar de marmolista y yo dije que 'Yo'», reveló en 'Lo de Évole'.

El presentador, un tanto sorprendido, quiso profundizar en los motivos de dar carpetazo de esa manera a una prometedora carrera. «Quería cambiar de aires. No era feliz, no me sentía con una vida plena y no le veía el sentido. Cada vez veía que iba a ser más famoso, más famoso; y dije hasta aquí hemos llegado, se acabó el cine». Trabajaba 12 horas por 700 euros al mes, y con todo y con eso echa la vista atrás y considera que fue una época muy necesaria para él.

Pese al parón, al intérprete le molesta que se le considere un juguete roto o un niño prodigio. «Yo he seguido currando, a la vista está», apuntó. Tal es así que sacó pecho al recordar la determinación que tomó hace una década y, muy contundente, explicó el porqué. «Mi padre ha trabajado en la obra y nunca se ha quejado y luego te encuentras con estos actores que se quejan por todo… ¿Pero qué haces, tío?, tienes una vida de privilegiado. Lo que tendría que hacer esa gente es doblar el lomo trabajando en la obra». Por eso a día de hoy sigue haciendo 'chapuzas' si no tiene ningún proyecto interpretativo entre manos.

Además, el comunicador le preguntó a Juanjo Ballesta por la sonada 'desaparición' de 132 días que mantuvo en vilo a la prensa hace unos meses. Una cuestión que provocó las carcajadas del invitado. Lejos de todo lo que se especuló, la explicación es bien sencilla. «No desaparecí, lo único que hice fue dejar las redes sociales porque estaba 'viciadísimo' a Instagram».

«La idea de poder llegar a Hollywood, poder ganar un poco más y ayudar a la familia» es su próxima meta. Solo le falta aprender inglés, explicó, provocando las risas del presentador. «Perdona que me ría, pero es que me hace gracia que digas que tu objetivo es llegar a Hollywood y que lo primero que tienes que hacer es aprender inglés. Me parece de una determinación y de un punto de decir: '¿Qué pasa?' Me fascina», reconoció Évole, a lo que añadió que Ballesta tiene una seguridad en sí mismo ‘acojonante’. El protagonista de ' El Bola' lo reafirmó. «Estoy seguro de que, si aprendo inglés, llego».