Directo de alto riesgo: La Guardia Civil frena el ataque al equipo de reporteros de 'Ya es mediodía'

'Ya es mediodía' ha estado pendiente durante toda su emisión de la noticia de la mañana, que era la del atrincheramiento de un hombre durante más de doce horas en un piso con dos rehenes tras haber asesinado a un hombre y disparado a un agente de la Guardia Civil, para ello, el programa ha estado haciendo conexiones periódicas con Marina Vidal, periodista desplazada hasta Santovenia de Pisuerga, donde el ambiente se ha ido enrareciendo cada vez más entre los familiares de los afectados a medida que pasaba el tiempo.

La reportera estaba informando a Sonsoles Ónega de los últimos datos que había recabado cuando un hombre se ha abalanzado sobre la cámara, impidiendo que obtuviera imagen alguna. Con las imágenes del municipio en directo, la presentadora de 'Ya es mediodía' ha alertado a sus colaboradores de que algo estaba sucediendo. «Cuidado, nuestra compañera Marina Vidal», decía Sonsoles Ónega, mientras se hacía el silencio en el plató del programa de Telecinco y se escuchaba el ataque verbal de una mujer a la reportera.

«¡Cuántas veces hay que deciros que no!», le espetaba la joven a Marina Vidal, mientras le cogía el micrófono y la intimidaba arrinconándola. La periodista le comentó que estaban haciendo su «trabajo», pero la agresora hacía oídos sordos a la reportera, que seguía acosándola. La periodista, muy agobiada, vio cómo una compañera de Antena 3 salió en su ayuda e intentó que la individua dejara de intimidar a la periodista de 'Ya es mediodía' haciendo hincapié en que estaba haciendo «un directo».

La joven seguía sin entrar en razón y en un tono muy agresivo exclamó de manera burda: «¡Me suda el coño!». Viendo que la situación cada vez se tensaba más, la periodista de Antena 3 intentó hacer de muro entre la reportera de 'Ya es mediodía' y la agresora, que todavía se vino más arriba. «Que no me levantes la mano, que te parto la cara... ¡Que me suda la polla!», increpó la joven.

En ese momento, un segundo hombre se acercó al equipo de 'Ya es mediodía' y fue cuando la Guardia Civil entró en escena e intervino para evitar que la situación fuese a mayores.

Con los agresores bloqueados por los agentes de la Benemérita, Sonsoles Ónega tranquilizó a su reportera y le agradeció su «encomiable trabajo», destacando que en ningún momento había entorpecido las «labores de la Guardia Civil», como también se acordó del cámara de 'Ya es mediodía' del que dijo que había mantenido «el tipo» durante todo el tiempo.