parrillada mixta
Tremendismo climático
Hemos visto naves en llamas más allá de Alcorcón, y rayos C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Toledo
De los Mohedano a las Pardo de Vera
Sanchologías
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Iniciar sesiónEntre que nuestra alta clase política está de permiso retribuido y que hace calor, el normal para primeros de agosto, las cadenas se han echado al monte ardiendo del sensacionalismo meteorológico, especialidad de la casa junto a los callos y las bravas. Hemos visto ... en los últimos días cosas que vosotros no creeríais: naves en llamas más allá de Alcorcón, y rayos C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Toledo. Se pasan cuatro pueblos los editores televisivos en estas circunstancias tan adversas. No pegan ojo, más por el arrebato recreativo que les entra al acostarse que por los calores de unas noches –dijo el martes una reportera climática– «ecuatoriales».
Dos ejemplos de los últimos siete días son suficientes para ilustrar este soberbio espectáculo, tráiler del apocalipsis en el que no faltan los figurantes, víctimas anónimas y callejeras que cuentan sus penas con esa gracia que Dios les dio para hacer del bochorno virtud, como Sánchez de la necesidad.
—Si quieren aire acondicionado, que lo pidan.
El primer vídeo nos lleva a los informativos de fin de semana de Antena 3, cadena que no dudó en incorporar a sus telediarios las hechuras 'noir' y el tremendismo de 'Equipo de investigación', materializado en piezas que parecen realizadas para su comercialización en TikTok antes que a través de un medio tan tradicional y sobrio como la tele. Alarde tipográfico, montaje febril y una música de fondo estremecedora para contar, por así decirlo, lo de los incendios forestales. ¿Wagner? Mucho peor: X-Ray Dog, que es una firma californiana de música de biblioteca que proporciona a los medios audiovisuales fondos sonoros diseñados para sobrecoger y desasosegar al público. Pegar ojo es imposible, y no por el calor.
El segundo vídeo nos lleva a Telecinco, que desde la llegada de Franganillo ha acentuado su compromiso con los más vulnerables, del franquismo o del sanchismo, que para el caso es lo mismo, aunque los afectados no se terminen de enterar. Esto es del pasado lunes: resulta que una reportera fue a Vallecas para tratar de demostrar 'in situ' que en función de unas variables socioeconómicas, inmobiliarias y energéticas que solo ella manejaba –ilusionismo de clase– allí hace más calor que en otros barrios. La pobre también debió de ver cosas que nosotros no creeríamos, quizá consecuencia de no pegar ojo de noche y de ponerse a distinguir, como el que cuenta ovejas, entre clases de bochorno.
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