Rocío Flores, entre lágrimas: «Estaría bien tener un acercamiento con mi madre»

El caso es que al final, superando sus absurdos miedos, allá se fue Rocío . No se vieron tiburones. Ni sangre.

Por tanto, podemos decir que la hija de Rocío Carrasco sobrevivió a los tiburones. La duda es si sobrevivirá a los «escorpiones», dicho esto metafóricamente. Los «escorpiones» son los que más pican en la isla, o sea, Yiya y, últimamente, Avilés . A la gala de ayer ambos jóvenes llegaron en apuros, pues estaban nominados.

Por concretar, en la rampa de salida estaban el rapero Nyno , un personaje que «ni chicha ni limoná»; Yiya «Busca Bulla»; la «kryptonita» de Rocío Flores y de tantos otros y otras; y José Antonio «El Zumbido» Avilés , al que así apodamos porque escucharlo es el equivalente a dejarse encendida la campana extractora.

El rapero se puso místico y dijo que, ocurriese lo que ocurriese, sería «voluntad de Dios». Avilés y Yiya , como son más terrenales, admitieron que los nervios les estaban causando problemas intestinales; para ser exactos, la modelo extremeña admitió sufrir «cagalera».

Tomó la palabra JJ para anunciar que la primera salvada era Yiya . La carita de Rocío al escuchar el veredicto fue todo un poema.

Y llegó el momento más esperado de la noche. Y la voluntad de la audiencia, que en «Supervivientes» es Dios, fue que el cantante cambiase la isla por el confinamiento. O sea, los Cayos Cochinos por España . Que lo echaron, vamos. Lo que equivale a que los «escorpiones» pueden seguir azuzando a Rocío una semana más. Yiya seguro que lo hará si tiene ocasión (están en grupos distintos). Avilés (que figura en el mismo equipo) acabó la noche pidiendo disculpas a Rocío , pero, dado su carácter volcánico, no se descartan nuevos estallidos.

Estaba tocada Rocío . Se quedaban Yiya , su enemiga desde el principio, y Avilés , con el que ha roto amarras en los últimos días y con quien, pese a ese arrepentimiento final, su relación ha quedado tocada («no va a volver a ser la misma», en palabras de la hija de Antonio David ).

Estaba tocada y para que lo estuviese aún más le pusieron unos vídeos en los que discutía muy acaloradamente con el colaborador televisivo. Después, JJ la mandó a un aparte, para hacerle una entrevista que giró básicamente sobre su relación con su madre, Rocío Carrasco , con la que lleva siete años sin hablarse. Y tiene 23. No fue la primera vez que habló de su progenitora durante el concurso. Pero sí la ocasión en la que lo hizo durante más tiempo.

JJ hizo todo tipo de intentos para que la nieta de «La más grande» le mandase un mensaje de cariño a su progenitora. Rocío se resistió. «Me encantaría tener relación con ella, pues sí. ¿Que no la tengo? Pues es la realidad», admitió la concursante desde Honduras. Insistió mucho en que –aunque quiere en la misma medida a su padre que a su madre– ella tiene asumido el distanciamiento, pero «lo peor es lo de mi hermano, que se está criando sin su madre». «Estoy aquí por mi hermano, decidí venir para poder ayudar lo máximo posible a mis dos hermanos», aseguró, pero no aclaró en qué consiste esa ayuda.

JJ : ¿Crees que le tienes que pedir perdón a tu madre?

Rocío : Creo que no.

Al final, tras la enésima pregunta de JJ , acabó cediendo. «Quizá estaría bien tener un acercamiento. No ya no tanto por mí sino por el que viene detrás mía», dijo Rocío en relación a su hermano.

Antonio David , que ya estaba de cumpleaños a esas horas (madrugada del 24), dejó caer un torrente de lágrimas en el plató. «Hace tiempo que no llorabas», apuntó JJ , como dándole trascendencia histórica al episodio.

Llegaron a la isla y enterraron el hacha de guerra. Elena llegó a decir abiertamente que quería que Hugo , el ex de su hija Adara Molinero , ganase «Supervivientes 2020» . Pero ya son más de dos meses en los Cayos Cochinos y la convivencia va desgastando la paciencia. La chispa la prendió una acusación de Elena , que esta última semana ha visto al uruguayo un tanto vago, y así lo denunció. En vivo y en directo, se enzarzaron en una tremenda discusión, en la que salió el nombre del bebé que tienen Hugo y Adara , es decir, del nieto de la propia Elena .

Hugo : Yo estoy mal hace dos semanas, no una, porque yo hace dos semanas vengo martirizado, mortificado, porque extraño un huevo a Martín.

Elena : ¡Mira! Hemos venido a «Supervivientes» a luchar...

Hugo : Esta señora siempre que tiene posibilidad me ataca.

El asunto acabó de lo más feo: «No me escupas cuando me hablas», gritó Elena. «Sucio, que eres un sucio», añadió la madre de Adara Molinero , que acabó ignorando a la persona que tenía al lado en la isla y dirigiéndose a su hija, que la estaba viendo desde España.

Yiya avaló a Elena al decir que había detectado un «cambio abismal» en Hugo , que se ha entregado al «sedentarismo». «Esta semana ha estado especialmente solitario», corroboró Jorge , el guardia civil.

Se ve que se están alineando todos contra el argentino. Tanto acuerdo huele a chamusquina. Porque los habitantes de la isla saben de sobra que ya ganó un «Gran Hermano» y que, a estas alturas, está muy bien posicionado para hacer el doblete y lograr también el tesoro de «Supervivientes» . Quizá por esos temores Hugo acabó la noche nominado, junto a Jorge , Barranco y Avilés . Todos hombres. Mandan ellas, que se han erigido además en capitanas de los dos grupos: Ivana (mortales) y Yiya (siervos). Y que aspiran a la victoria final especialmente con Rocío Flores , convertida ya –por méritos propios y ajenos– en la protagonista absoluta de esta edición.