Marcos Orengo, Feliciano en 'La Promesa', avanza cómo será su despedida: «Me duele dejar la serie»

Para Orengo, protagonista de la última entrega de 'Si el servicio hablara...', han sido siete meses de rodaje muy intensos en los que el aprendizaje –y el madrugón– ha sido diario; el intérprete, tras su salida de la serie por motivos del guion, se queda también con la gente que ha conocido. El actor reconoce que, al principio, no sabía como 'trabajar' a Feliciano, el 'hermano' de Petra (Marga Martínez), que llega de su pueblo a palacio en busca de una oportunidad.

«Me lo imaginaba tosco, sin modales... Me costaba irme a ese extremo y encontramos cosas pequeñas. El 'click' era entender que él queria sentir. Había estado encorsetado por su familia, sin libertad, cuidando a su padre. Quería salir fuera y vivir una vida», cuenta Marcos Orengo. Fue entonces cuando su personaje, Feliciano, empezó a 'salirle' más amable: «Tiene un corazón muy bonito a pesar de lo que ha vivido; hace todo desde el corazon y es muy fiel».

Orengo cree la unión de Feliciano y Teresa (Andrea del Río), a pesar de su negativa inicial, se debe a que ambos son buenas personas. El actor, al principio, lamentaba no tener trama con ningún otro personaje. Lo cierto es que Feliciano tuvo que ganarse a todos sus compañeros de servicio después de que se descubriera que él había sido el responsable, junto a su 'hermana' (madre), del robo de Dieguito, el hijo recién nacido de Pía (María Castro). Fue gracias al personaje de Teresa que Feliciano se enfrentó a su Petra.

«El día de confesar que yo maté a mi padre, dos meses y medio después [de su entrada a la serie], fue de las primeras secuencias donde tenía que echar toda la carne en el asador», recuerda Marcos Orengo. El actor también recuerda cuando, durante el ensayo de la escena donde pega a un árbol (tras descubrir que Petra es su madre y no su hermana), se rompió la mano.

«Fue por inconsciencia, por no controlarme, que le puse demasiado impetu y reventé aquel árbol, me rompí la mano en el ensayo», rememora. Aquel revés tuvieron que incorporarlo los guionistas. Hasta cuatro tomas rodaron después. Orengo asegura que tiene la lección aprendida y promete que no volverá a pasar «a todo el mundo», a Bambú Producciones y al resto de productores.

«Ese último bloque, desde los últimos cinco capítulos tras el tiro, es, para mí, una genialidad desde guion y argumento; los diálogos. Cómo se despide de Petra, de Teresa, de María Fernández y de Jana», reconoce. El rodaje de la operación, durante 4 horas, fue precioso y complicado. «Con la adrenalina en pico... el ambiente estaba caldeado. A partir de ahí, ver cómo Feliciano va muriendo poco a poco... Él ya se cae y no puede con su alma. El médico confirma que se está muriendo; las escenas con Petra y Teresa son devastadoras», continúa.

Por último, Marcos Orengo tiene un mensaje para los espectadores de 'La Promesa': «Que echen de menos a Feliciano, que les duela esa despedida tanto como me duele a mí dejar la serie. Los espectadores han recibido lo bien que me lo he pasado; que sigan viendo la serie. Se vienen cosas muy caldeantes. [Feliciano] tiene una despedida preciosa y va a dar de qué hablar. ¡Que vuelva feliciano!».