Hovik Keuchkerian es Jon Gutiérrez en 'Reina Roja': «Hay cosas que están mejor en la serie que en la novela»

—Proyecto ambicioso.

—Hombre, cualquier actor del mundo hubiese querido meterse en la piel de Jon Gutiérrez. Y a quién no le gusta, y quien diga 'no' miente, que alguien como una compañía como Amazon me quiera a mí y venga a buscarme. Juan [Gómez-Jurado] me lo mandó hace mucho; no sé si era un proyecto. Hace años me mandó la novela y la dejé. No soy persona de futuribles. Me siento afortunado, privilegiado; es un reto muy grande y no dudo de que daré el 100%.

—O sea, que él ya te lanzó el anzuelo.

—No me lanzó nada. Él me lanzó la novela. ¿Tú has leído la novela?

—No.

—Entonces, ¿para qué cojones preguntas? Si tú lees la novela, según describe a Jon subiendo las escaleras, te das cuenta de que si no me manda la novela, es imbécil. Porque el que sube las escaleras soy yo [1,91 metros]. Léete la novela y entenderás por qué me mandan la novela. No sube las escaleras del piso de Antonia Scott un tipo de metro sesenta de Cuenca, calvo y con barba. No. Las subo yo.

—Vamos, que el papel era para ti.

—Ahora que estoy…, pues sí. Después de que todo el mundo haya puesto de su parte para que estuviera, pues estoy, pero en ese momento simplemente me mandaron la novela para que la leyera.

—¿Te has preparado el papel de una manera concreta? ¿Has hablado con Juan Gómez-Jurado? ¿Le has pedido consejo?

—No. Sonará soberbia la respuesta, pero no suelo pedir consejo; ese es mi trabajo. Preparo este personaje como todos los personajes que he preparado hasta la fecha en mi carrera como intérprete. Lo he hecho de una forma muy seria, proceso largo, y metiéndome muy a fondo. Lo que he hecho ha sido… por supuesto me leí la trilogía muchas veces. Muchas veces. Soy muy obsesivo con el trabajo. Hasta que llegaron los guiones y me di cuenta de que leer los guiones y la novela al mismo tiempo me llevaba a equívocos porque hay partes… está muy bien adaptada… hay cosas de la novela que no debían estar en mi cabeza. Dejé las novelas en un rinconcito y trabajé los siete guiones. Me alejé prácticamente de Juan [Gómez-Jurado], no como persona, buen amigo, sino como escritor de la novela, de las ideas que tiene cada cual de Jon Gutiérrez. Amazon me ha fichado a mí y soy yo. Entonces lo hago yo.

—¿Cómo defines al Jon Gutiérrez de la serie?

—Perdón, que no había terminado. Entonces, si me permito el lujo muy, muy arriesgado de escuchar a todo el mundo y en primer lugar a Juan… cosa que no ha hecho. Juan es muy listo, vio que tenía muy claro yo por dónde quería tirar Jon y le pareció maravilloso. No creo que se hubiera metido. Juan es un tipo muy intuitivo. Respetando unos pilares fundamentales de quién es Jon Gutiérrez, he hecho mi Jon Gutiérrez. Espero que le guste a la gente. Si no, me despedirán y me darán por todos los lados y ya está. Es lo que tiene este curro.

—¿Cómo es el Jon Gutiérrez de la serie?

—Ya lo dije en la presentación de la serie, en el Ayuntamiento de Madrid. Es una actualización de Sancho Panza. Si Sancho Panza fuera superhéroe sería Jon Gutiérrez. Es un tipo con una honestidad brutal, clara, directa. Tiene necesidad natural de defender a la gente, sobre todo a la gente débil. En este caso, Antonia es potente intelectualmente, pero necesita un escudero, una inteligencia emocional, un alma y un corazón como los que tiene Jon. Por otra parte, Jon es un tipo que lleva su carga, su sufrimiento, su dolor, su cruz. Es un tipo que creció con su madre, su amatxu. Es un tipo que es policía nacional, que es vasco, que es gay. Es un tipo que, en mi opinión y son cosas mías, que dio un paso pa'lante a una edad muy temprana y dijo 'Yo soy gay. Esto es lo que hay. Si no te gusta, bien. Y si no, que te jodan'. Tiene una personalidad muy marcada. Honestidad. Lealtad. Necesidad de proteger a la gente que quiere. Eso es lo esencial.

—Decías que leías a la vez la novela y los guiones.

—Dejé.

—¿Qué aportan las novedades de la adaptación televisiva a la saga literaria?

—Aunque Juan dijese lo contrario, que no creo que dijese lo contrario... Yo soy escritor; no de novela, pero soy poeta. Tú escribes algo y por naturaleza, por esencia, lo metes en un cajón y a los dos años es mejor. A la que lo cojas, lo leas y le cambies dos cosas, es mejor. Si le sumas que la novela es magnífica, todo el equipo que ha ido adaptando… pues hay cosas que están mejor en el guión que la novela. La novela es espectacular, pero la adaptación es muy buena. La complejidad de resolver ese tocho en siete capítulos. Está muy bien resuelto, muy bien adaptado y en algunos momentos es superior. Tenemos que ser capaces de llevar todo eso al guión; todas las mejoras que hemos añadido al guión y ser capaces de llevarlo a la pantalla.

—¿Cómo describes la relación de Jon Gutiérrez con la Antonia Scott de la serie?

—Es bastante fiel. La relación que tienen en el libro y en la serie es… te la puedes encontrar en el día a día de cualquier persona. Tengo dos o tres grandes amigos que el primer día que nos conocimos nos habríamos dado una hostia. Así la definiría. Es un bicho raro [Vicky Luengo]. Está haciendo una Antonia Scott maravillosa. Te encuentras con ese bicho… es una friki, es una cosa, un bicho raro. A Jon le gusta, lo que es blanco es blanco y negro, negro. De primeras se echa para atrás. Lo hace porque lo tiene que hacer. No se toma ni un café con ese bicho y luego va descubriendo que detrás de esa coraza… Jon no es tonto. No tiene coeficiente intelectual. Tengo amigos con mucha cabeza y habitualmente es gente que sufre mucho. Y hasta que no entiendes que las cosas de la vida no se entienden… Las más importantes… no responden a una fórmula y peña como esta lo pasa muy mal.

—¿Te han puesto doble de acción?

—No. Eh, sí.