Cinco series cortas que ya han acabado (o están a punto) para ver este fin de semana

A la serie de La 1 (TVE) protagonizada por Daniel Grao todavía le quedan tres episodios por emitir (son diez en total), pero muy mal tiene que acabar para que no se convierta en una de las series españolas más interesantes de la cosecha 2020. La fórmula no es nueva: un profesor alternativo y dispuesto a agitar el avispero, o sea, el instituto donde recala. Ya lo hizo su predecesora, «La otra mirada» ; ambas utilizaban los conflictos adolescentes para repartir estopa (machismo, homofobia, acoso escolar, clasismo, etc.) Pero si «La otra mirada» parecía una serie de tacitas («Downton Abbey»), ésta, como su propio protagonista, se presenta más gris, más macarra, más incómoda. Otro cantar es que, con el paso de los capítulos, el personaje de Grao se revele como un corderito con piel de lobo. Ojo al casting de jóvenes.

Los siete episodios de «HIT» están disponibles en RTVE.es

[ «HIT» está de muy buen ver ]

Lo mejor de «Antidisturbios», el regreso de Rodrigo Sorogoyen e Isabel Peña a la televisión (hicieron «La pecera de Eva, coñe ), es el camino que la ficción toma a partir de su ecuador: más pausado... hasta que pum . Como en todo thriller , la premisa es la punta del iceberg y no es oro todo lo que reluce. Y aquí entra Vicky Luengo (también en «La pecera de Eva»), como esa policía de Asuntos Internos dispuesta a (casi, casi) todo por hacer «justicia», pero que en ningún momento cae mal a pesar de la mala leche que gasta (lo del café, uy ). El título es, de entrada y apariencia, «machirulo» (no lo es), pero tiene secundarias que hay que nombrar: Mónica López –sin el acento canario de «Hierro»–, Mona Martínez –que se roba el final de «Veneno»– y Marta Poveda , que también salía en «La pecera de Eva». Esta última protagoniza junto a Raúl Prieto una trama de puro acoso, quizás la más terrorífica de todas. Porque la serie de Movistar+ habla de una masculinidad tóxica que se presenta de mil maneras: desde el hombretón que ignora su propia depresión hasta al niñato que no sabe controlar su ira. Tiene cositas de guion patilleras (ese polvo en una discoteca, esa boina), pero engancha tanto como «La unidad» , con la que poco comparte. Hasta sale, aunque sin barba y mal vestido, Alfonso Bassave , que también salía en «La pecera de Eva»...

La primera temporada de «Antidisturbios», de seis episodios, está completa en Movistar+.

En los mentideros se comenta que la adaptación de la novela de Fernando Aramburu por parte de HBO España y Aitor Gabilondo no está haciendo el ruido esperado. Mientras haya subido el número de suscriptores de la plataforma... Tras la polémica del cártel y el estreno de sus dos primeros capítulos, poco se ha escrito sobre ella que tenga verdadero jugo. Las reseñas en «Fuera de series», a cargo de Alberto Nahum García, sí merecen la pena y es un agradable recordatorio de aquella época en la que tanto se escribía sobre series en blogs, como el de él . También está su podcast oficial en Spotify, en el que sus responsables comentan y explican la jugada. Lo mejor es Loreto Mauleón como Arantxa, la hija de la abertzale Miren ( Ane Gabarain ). Es ella, aunque dependiente y en silla de ruedas, la que hace mover constantemente la trama; es un teléfono, no escacharrado, sino reparador. Su actriz es la que, con menos, más se luce en ambas líneas temporales. Mikel Laskurain , como el marido de Miren, es el otro intérprete que ha cogido la delantera desde el ecuador de la temporada. La parte más «formulaica» es lo relativo al joven etarra, pero donde más brilla la ficción es en los conflictos familiares: esas rencillas entre padres, hermanos y matrimonios. A diferencia de «Veneno» , en la que el presente va comiéndose poco a poco al pasado, en «Patria» sucede al revés. Es una pena que a personajes como el de la fantástica Susana Abaitua (otra que salía en «La pecera de Eva») les falte enjundia por la falta de tiempo.

La primera temporada de «Patria», de ocho episodios, está disponible en HBO España.

La serie de HBO dirigida íntegramente por Luca Guadagnino acaba con -tápense los oídos- la canción «The love we make», de Prince . El cantante murió en 2016, mismo año en que está ambientada esta ficción de ocho episodios sobre dos adolescentes, Fraser ( Jack Dylan Grazer ) y Caitlin ( Jordan Kristine Seamón ), que viven en una base militar estadounidense en Italia, pero escapan de toda etiqueta. Con Guadagnino («Call my by your name») como director y guionista, es tentador dejarse llevar e ignorar el resto de nombres involucrados, pero entre su equipo de guionistas está Paolo Giordano , autor de la novela «La soledad de los números primos» , cuyos protagonistas son también dos adolescentes perdidos. Ubicar la historia en los últimos meses de 2016 permite a sus guionistas colocar como ruido de fondo a Donald Trump ... hasta que su victoria de las elecciones de Estados Unidos cierra uno de los episodios. Al título le interesa esa transición de la vieja a la nueva normalidad y en él hay otras fronteras que se cruzan: adolescencia/adultez, hombre/mujer, matrimonio/amantes, padres/hijos... y la de la propia base militar y el exterior, donde transcurren algunos de los tramos más potentes. La confusión propia de la adolescencia se traslada a las múltiples, pero dispersas tramas (incluso un despertar religioso). Ofrece florituras por doquier –hasta el ralentí de un corte de pelo– y la serie es mejor cuando se centra en la rara amistad de sus dos chavales protagonistas.

La primera temporada de «We Are Who We Are», de ocho episodios, está disponible en HBO España.

A «Raised by wolves», sobre una pareja de robots que cría humanos en un planeta, o se la ama o se la odia; están aquellos que, al cabo de un par de entregas, se decepcionaron una vez dejó de dirigirla Ridley Scott . Y están quienes la encumbran como la nueva «Battlestar Galactica» (tampoco) por mezclar ciencia ficción con religión. Su principal guionista, Aaron Guzikowski , deja muy claro de qué quiere hablar: paternidad y fanatismo. Y aquí, la que corta el bacalao es una androide ( Amanda Collin , guau ) que la pintan como la mala de la película pero, con el paso de los episodios, se descubre que el chiflado es otro... Hay personajes muy pobremente escritos (el de Sue, interpretado por Niamh Algar ) y hay un volantazo de guion que, o agarra, o suelta definitivamente al indeciso espectador. Aviso: el nivel de asquerosidad y alucinaciones va en aumento.

La primera temporada de «Raised by wolves», de diez episodios, está disponible en TNT España. Ya está renovada por una segunda.