La abrupta adolescencia de Alejandro Magno, el emperador más poderoso de Europa con solo 16 años

La existencia de Alejandro Magno estuvo marcada por la ambición, las luchas por el poder, las intrigas a su alrededor, los excesos y la lujuria. A través de reconstrucciones dramáticas y con los testimonios de importantes historiadores, esta miniserie documental –dividida en dos capítulos– recrea los momentos más importantes de la vida del conquistador que, con la palabra, era capaz de movilizar ejércitos enteros: «No hay una parte de mi cuerpo que no tenga una cicatriz y todas son por vosotros, por vuestra gloria y prosperidad».

El primer capítulo ahondará en la dura infancia del emperador. El 20 de julio del año 356 a. C. la reina Olimpia dio a luz a su segundo hijo, Alejandro. Nacido en Macedonia, este reino estaba muy lejos de los modernos núcleos urbanos y era un humilde estado agropecuario. Carecía de relevancia económica y estaba amenazado políticamente . Pero el padre de Alejandro, el rey Filipo II consiguió que el reino progresase y en particular su capital: Pela.

Los padres de Alejandro también creían en su ascendencia divina. Los dioses de la mitología griega eran los grandes modelos a seguir del heredero. Su mayor héroe era Aquiles , el mito de la guerra de Troya. Cuando el príncipe cumplió trece años, Aristóteles aceptó acudir a Pela para ser el preceptor del heredero. Transcurridos tres años, Alejandro estaba preparado para gobernar.

Pero la adolescencia de Alejandro se interrumpió abruptamente a los 16 años. La agresiva política expansionista del rey Filipo II originó un nuevo conflicto y se avecinaban guerras sangrientas . En ausencia del rey, que se encontraba en el campo de batalla, el reino quedó a cargo de Alejandro. Después de la guerra, Macedonia se convirtió en la nueva superpotencia militar de Grecia y Alejandro en el héroe de Queronea.

El siguiente capítulo, que será emitido el próximo miércoles 29 de enero, arrancará con un Alejandro Magno de apenas 16 años. Fue entonces cuando se convirtió en el hombre más poderoso de Grecia. Su cruzada contra el rey Darío , el poderoso soberano persa, supuso años y años de guerras. Alejandro estaba decidido a lograr la victoria para los griegos. Cruzó el estrecho que separa Europa de la actual Turquía con el objetivo de liberar a las colonias griegas de los persas.

En el año 334 a. C., Alejandro y sus hombres lograron su primera victoria en el río Gránico. En pocos meses, el macedonio conquistó las ciudades costeras más importantes controlando una gran parte de la actual Turquía. Finalmente, Darío no tuvo más alternativa que la huida, confirmando la derrota de los persas.

La mayoría de los aliados persas celebraron al macedonio como a un libertador . También los egipcios lo recibieron con los brazos abiertos. Tras su ascenso al poder, Alejandro hizo una ofrenda a los dioses egipcios y consiguió lo que esperaba: ser proclamado faraón. Fundó la ciudad de Alejandría, construida siguiendo el modelo griego y que se convirtió en símbolo de su pasión por difundir su cultura en las regiones conquistadas.