Series inglesas para simular un campamento de intercambio de idiomas desde el sofá

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7 días a la parrilla

Joyas de animación para adultos

Máximo Sentencia

Afterlife (Netflix)

Escrita, dirigida y protagonizada por el cáustico e irreverente cómico Ricky Gervais lo que significa de forma automática garantía de calidad y polémica. Gervais interpreta a un hombre de mediana edad que al enviudar pierde las ganas de continuar viviendo. Sus amigos y compañeros de trabajo deberán lidiar con su oscuro carácter y la total falta de ganas de agradar de Gervais. Inteligente, profunda y con un humor muy muy británico.

Normal People (Prime Video)

La adaptación de la novela homónima de Sally Rooney es la clásica historia de crecimiento y proceso de maduración. El drama y el romance de Marianne y Connell arranca en su último año de instituto en Irlanda y abarca hasta varios años terminada su estancia en la universidad. Todo un viaje en el tiempo en el que los veremos cambiar, amarse, odiarse, necesitarse y dañarse. Intimista, delicada y sutil.

Peaky Blinders (Netflix)

Una de las joyas del género dramático histórico que nos llevará a la década de los años veinte en la ciudad industrial de Birmingham. Allí los Shelby, también conocidos como los Peaky Blinders, una familia y grupo mafioso tratará de hacerse con el control de la ciudad y poco a poco del país. Brutal, directa y descarnada y con la excepcional interpretación de Cillian Murphy en el papel protagonista de Thomas Shelby. Esencial para cualquier amante de las series.

State of the Union (HBOMax)

Un formato sorprendente en capítulos de diez minutos que nos muestran el antes y el después de las sesiones de terapia matrimonial de Tom y Louise, Chris O'Dowd y Rosamund Pike respectivamente. Amor, reproches, diálogo tremendamente inteligente y situaciones tremendamente reconocibles para cualquier ser humano que haya tenido una relación sentimental significativa.

Downton Abbey (Netflix)

Si la flema inglesa se pudiera encapsular en una serie inglesa sería 'Downton Abbey'. Nada como seguir las idas y venidas de la vida de la familia Crawley, perteneciente a la alta aristocracia de Yorkshire entre 1912 y 1926. Sirvientes y aristócratas verán cambiar el mundo a pasos acelerados y tratarán de entenderse entre drama, romance y acontecimientos políticos y militares. Cuesta pensar que esta realidad es coetánea de la que nos cuenta 'Peaky Blinders'. Universos completamente opuestos.

Fleabag (Prime Video)

La cómica Phoebe Waller-Bridge interpreta a una joven londinense que debe lidiar con la búsqueda de pareja, su alta sexualidad, una hermana que roza la psicosis y una familia que más que personas son traumas con piernas. Mordaz, inteligente, ingeniosa y con un sensacional uso de la rotura de la cuarta pared a través de la cual Waller-Bridge se dirige directamente al espectador en comentarios y chistes que ningún otro personaje puede oír.

Line of Duty (Netflix)

Todos conocemos al temido departamento de asuntos internos de las series y películas estadounidenses. ¿Será igual el de la policía inglesa? Absolutamente no. En 'Line of Duty' veremos cómo el miedo a este departamento se puede infundir a base de corrección, educación exquisita y sin necesidad de bravuconerías a la americana. Uno de los últimos grandes éxitos de la producción británica con seis temporadas altamente adictivas.