Crítica de 'Gen V': la edad del pavo del universo de 'The Boys'
Uno acaba viendo una especie de monstruo de Frankenstein audiovisual: lo peor de 'Los juegos del hambre' multiplicado por 'Al salir de clase' y elevado al drama insulso de 'Élite'. Pero con mucha sangre y muchas vísceras
'The Boys': a la tercera no va la vencida, ni se dan por vencidos
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Iniciar sesiónSi por algo ha sobresalido 'The Boys' a lo largo de las tres temporadas que hemos tenido la suerte de disfrutar es por su contenido adulto, satírico y políticamente incorrecto: palabras malsonantes, sexo explícito, violencia, casquería sin censuras y una mordaz y salvaje crítica ... al mundo de las grandes corporaciones estadounidenses.
En la era del 'buenrollismo' y dejar a todos contentos de Marvel y sus Vengadores –que vengar, lo que es vengar, vengan más bien poquito– se agradece que Prime Video apostara por un producto como 'The Boys' que no duda en saltar en cada charco que se encuentra. Pero claro, Prime Video es Prime Video y uno no puede renunciar a su naturaleza. Y la naturaleza de Amazon no es otra que la pasta. Por eso no ha podido resistirse a crear una versión adolescente de 'The Boys' para enganchar a un nuevo segmento de edad.
'Gen V' tiene lugar en la Universidad Godolkin para jóvenes con superpoderes a la que acuden los futuros superhéroes aspirantes a formar parte de la élite de la lucha contra el crimen. Como no podía ser de otra manera, en Godolkin hay programas secretos, oscuras intenciones y poderes ocultos en la sombra que experimentan con los alumnos. Hasta aquí, todo muy estándar para una serie de superhéroes.
El problema es que el tono de 'The Boys' no encaja en absoluto con los temas y tramas adolescentes que ya estamos cansados de ver repetidas en todas y cada una de las series de instituto o 'jóvenes adultos', como se llaman ahora. A los personajes de 'Gen V' lo que más les importa es lo que el resto piense de ellos y por ello acaban reducidos a estereotipos desdibujados y vacíos sin ninguna personalidad. En 'Gen V' tenemos al guapo, a la reina del baile, la inadaptada de baja clase social, la amiga que sólo busca agradar y por supuesto el director corrupto y dictatorial.
Si a ello le sumamos que Prime Video ha pensado que al ser para una audiencia más joven había que sobrecargar la serie de activismo social ultraprogresista uno acaba viendo una especie de monstruo de Frankenstein audiovisual: lo peor de 'Los juegos del hambre' multiplicado por 'Al salir de clase' y elevado al drama insulso de 'Élite'. Pero con mucha sangre y muchas vísceras, eso sí.
La triste paradoja es que a quien disfrute de 'Gen V', no le gustará 'The Boys' y desde luego a quien le guste 'The Boys' no soportará 'Gen V'. Extraña estrategia la de crear dos productos dentro del mismo universo que dividirán su audiencia en lugar de multiplicarla. La duda que siempre quedará sin resolver es si Prime Video ha querido hacer una sátira de las series de adolescentes y la cosa les ha salido rana, pero muy rana. Nunca lo sabremos.
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