Piloto a la fuga

Frank Webster es enviado a la cárcel tras la muerte en un accidente de tráfico de un camionero que intentó mandar su coche fuera de la calzada. Durante su estancia en prisión, los amigos del camionero planean asesinarle, por lo que Webster escapa, convirtiéndose en un fugitivo de la ley. Por el camino, captura como rehén a Connie Adair, quien se convertirá a lo largo de la película en su cómplice y vivirán una apasionada historia de amor mientras huyen de la policía y de la pandilla de camioneros.

Protagonizada por los entonces emergentes John Ireland (“La casa de los siete cadáveres”) y Dorothy Malone (“El hombre de las mil caras”), esta cinta de coches y acción fue la primera película de los entonces desconocidos estudios American International Pictures, famosa por sus filmes de terror en la década de 1970 (“La morada del miedo”, “La isla del doctor Moureau”). A pesar de que Rob Cohen compró los derechos sobre el título para su película de 2001, no adquirió los de la historia, por lo que el argumento de ambos filmes es completamente diferente.