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Representantes, que no es poco

Los secretos detrás de quienes manejan la vida de los actores

El libro, realizado por el actor Mat Cruz, reúne consejos y experiencias de 62 reputados representantes de actores y actrices de España

Todos los beneficios del autor van destinados a Acción Contra el Hambre

Paquita Salas, ejerciendo de representante de Ana Obregón en la ficción de Netflix Netflilx

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El representante de actores es una de las profesiones más desconocidas del mundo del cine. Se sabe que suelen ser aquellos que acompañan a los actores o actrices de moda, que se encargan de decidir (o de decir) si se pueden hacer fotos o no con sus seguidores o si la última propuesta que les ha llegado es buena o no. Pero estas funciones, además de ser un cúmulo de clichés, solo se desarrollan cuando su intérprete tiene una carrera consolidada. «Paquita Salas» (Netflix) y los Javis arrojaron un poco de luz. Ahora, el actor Mat Cruz también quiere desmitificar la profesión con «Representante, que no es poco» , un libro que también busca ayudar a aquellos que quieren abrirse camino en el mundo de la interpretación o ya lo han empezado.

«Cuando comencé en la industria ni yo sabía exactamente a qué se dedicaban. Mi padre siempre me decía: "Uy, los representantes solo van por la pasta". Esa es la connotación parece que tienen en la sociedad, que son fríos y manipuladores. En algunos casos será cierto, pero en otros muchos no», explica el autor del libro, que ha entrevistado a 62 representantes españoles, entre los que se encuentran los directores de Gosua Management, representantes de Los Javis, Belén Cuesta o Brays Efe. «He visto trabajar a representantes –como los de Anna Mills International Actors, su agente en España, o Camilla Storey Management, en Londres– durante más de siete meses sin recibir nada a cambio. Si yo no trabajo, ellos no cobran. En este caso, van a comisión y el porcentaje suele oscilar entre el 10 y el 15 %», explica. «No tienen horario, ni fines de semana».

La mayoría de los representantes de actores llegan a este gremio por casualidad , porque trabajaban en comunicación o en agencias de modelos, o simplemente conocían personalmente a intérpretes reconocidos que necesitaban un asesor de confianza. «Trabajan con personas y se encariñan mucho, o no. También hay veces en las que no encajan con sus representados y terminan buscando la forma de separarse. Pero la parte más oculta de esta profesión es ese cariño que hace que sufran cada derrota como si fuera suya y que celebren cada victoria», comenta.

Vínculo emocional

Acompañan al actor los largos procesos de selección . «En ellos hay muchos intercambios de llamadas, muchas pruebas, comparaciones con otros actores, pruebas con otros ya seleccionados...», enumera. «Pero luce mucho el trabajo del representante cuando el actor trabaja. Cuando los actores no trabajan, parece que sean la última mierda, y es todo lo contrario. Cuando un intérprete no trabaja, es cuando mas se mueven», añade.

Pero si hay un momento complicado en la vida de un representante, uno que los seriéfilos ya vivieron junto a Paquita Salas, es el abandono de uno de sus actores . «Cuesta hablar de esto. Conozco un caso de un 'repre', del que soy muy amigo, que llevaba a un actor que ahora es muy famoso después de haberlo petado con una serie de Netflix. Lo llevó unos diez años y bueno, cuando lo petó, le dejó. En este caso concreto, no lo entendía. Si la fórmula había funcionado, si habían llegado hasta ahí juntos...», confiesa. Pero, como dice Miquel Folch en el citado libro, a menudo les dejan por un «representante de campanillas» , uno que tiene a actores conocidos en sus carteras y creen que van a tener más oportunidades, pero la realidad es que esos profesionales «no tienen más tiempo» para dedicarle al recién llegado.

Lo que también revela «Representante, que no es poco» es la respuesta a una pregunta que se han hecho más de un aficionado al cine y las series: ¿Hacen paquetes de actores? «Es cuando vendes a un actor lo acompañas con otros que no son reconocidos, como los americanos vendiendo películas. Es decir, uno de los actores de mi cartera opta a un papel y yo propongo a tres secundarios, que también son de mi cartera. Eso te hace ver la influencia que tienen las agencias de interpretación y creo que eso, desde el punto de vista de los actores, da fiabilidad porque ves a sus actores, aunque no sean conocidos, en muchos sitios», le confesó uno de los representantes.

Fines benéficos

Mat Cruz, autor de «Representante, que no es poco»

«Representante, que no es poco» es un libro escrito por Mat Cruz para «los nuevos actores». Con prólogo de los directores de Gosua Management, Juantxu Alvarez y Helena Maroto, que llevan las carreras de Javier Calvo y Javier Ambrossi , Belén Cuesta o Brays Efe, el actor ha preguntado a los 62 representantes españoles entrevistados cuestiones que laten en todo joven interesado en ser actor o actriz. Mientras responde cuestiones como ¿qué hace un representante? o ¿en qué se fija un representante para incluir a una actriz o a un actor en su cartera?, destina sus beneficios a Acción Contra el Hambre.

«Nunca hice el libro con intención de conseguir representante, porque ya tenía. (...) Lo pensé para que nuestra productora, La Masía Reels, dedicada a realizar videobooks para actores, diera valor añadido a nuestros clientes, muchos de ellos muy jóvenes, que quieren abrirse camino en el mundo de la interpretación o ya lo han empezado», concluye. Actualmente, está trabajando en otro libro similar. En lugar de representantes, entrevistará a reputados directores de cásting.

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