Muere Margot Kidder, la Lois Lane de Superman

Volar en brazos del periodista más famoso de los cómics la convirtió en un icono de los ochenta, pero su carrera no terminó de despegar a partir de entonces. «Ninguno de nosotros estábamos preparados para los ochenta. Nuestra mente seguía en los setenta, estábamos perdidos en una industria manejada por jóvenes agentes que se peinaban con secador de mano y cepillo», se justificó la actriz canadiense tras no conseguir adaptarse a la siguiente década.

Antes de encasillarse en el papel de una de las periodistas más famosas de la gran pantalla, había trabajado junto a Gene Wilder («Tengo una prima en el Bronx, 1970) y a las órdenes de Brian de Palma, con el que mantuvo una relación sentimental, en «Hermanas» (1973), un filme de culto en el que la actriz interpretaba a dos siamesas.

Después de meterse en la piel de Lois Lane, su presencia en el mundo del espectáculo fue esporádica: películas de bajo presupuesto y breves incursiones en alguna serie como «Cinco hermanos» o «Se ha escrito un crimen». Fue así como se reencontró con su «viejo» amor en «Smallville», la serie sobre la juventud del hombre de acero en la que coincidió con Reeve en dos episodios, en este caso con diferentes roles. Él era el doctor Virgil Swann; ella, su asistente Bridgette Crosby.

Como ya sucedió con otros actores, Margot Kidder sufrió las secuelas de la conocida popularmente como «maldición de Superman», que condena a actores que participaron en proyectos del superhéroe de Metrópolis a diversas fatalidades. Christopher Reeve sufrió en 1995 un accidente de caballo que le dejó en silla de ruedas y con respiración asistida; Kidder sufrió un episodio de amnesia un año después del incidente de su pareja en la ficción. Desapareció durante tres días cuando se dirigía al aeropuerto; reapareció asustada, con la ropa hecha jirones y el pelo cortado con una navaja. Su fuerte trastorno bipolar la llevó a pasar una temporada sin hogar en 1996; a partir de entonces se reconvirtió en una activista por la causa.

En 2011 fue arrestada tras protestar en la Casa Blanca por la obras de un gran oleoducto que transportaría petróleo desde Canadá a Estados Unidos.

El pasado domingo, Kidder falleció a los 69 años en su casa.