Jennifer Lawrence, licencia para enamorar: «Me divertí enseñando mis pechos al equipo de rodaje»

El papel de «Femme fatale» le queda a la medida, y es consciente de que su encanto y su sensualidad son una peligrosa tentación. En pantalla representa un arquetipo de mitológicas referencias que llega en pleno movimiento #MeToo . «Antes era normal si un hombre en una posición de poder te ponía una mano en la rodilla, ahora no se atreven ni a acercarse en una reunión con gente joven», reconoce la actriz con cierto orgullo. En pantalla, la glamurosa seducción de mitos como Rita Hayworth se ve sustituida por la salvaje naturalidad de Jennifer Lawrence . «Cuantos más personajes interpretas, más te das cuenta que ya has hecho algo parecido. Para mí, es importante no repetirme», defiende la actriz.

Por su parte, el director, Francis Lawrence, recuerda que trató con especial cuidado las escenas cargadas de sexualidad que trufan el filme. «Traté de crear un ambiente cerrado durante el rodaje en el que solo estuviera el mínimo de gente necesario para filmar esas escenas. He intentado protegerla al máximo», reveló a ABC el cineasta, gran amigo de la intérprete desde que rodaran juntos «Los Juegos del Hambre» . «La realidad es que rodar aquella saga fue muy distinto a “Gorrión rojo” . Francis es una figura casi paternal para mí y ya conozco al equipo detrás de las cámaras. No me sentí incomoda en ningún momento, al contrario, en ocasiones me divertía provocándoles enseñándoles mis pechos», responde Jennifer.

El propio Francis Lawrence confesó sus propios temores antes de ofrecer a Jennifer la posibilidad de protagonizar «Gorrión Rojo». «Jennifer siempre ha sido muy comunicativa, a los 21 ya decía que no quería protagonizar filmes en los que apareciera desnuda o de contenido sexual, y este filme tiene ambos elementos. Obviamente me puse muy nervioso cuando le ofrecí el papel», recuerda el cineasta. Entre ambos decidieron poner límites al personaje y a la cámara dejando solo las escenas de desnudos que fueran imprescindibles. «Le ofrecí la posibilidad de cortar lo que quisiera. Pero ella es una gran profesional y nunca me obligó a editar nada», admite el realizador.

En realidad, la actriz ha ido desprendiéndose de los miedos y no sufre con la timidez de hace unos años. «He ido superando mis inseguridades, ahora tengo más confianza frente a la cámara, especialmente si estoy trabajando con alguien como Francis que me brinda tanta seguridad», explica la todavía joven actriz.

Ganadora del Oscar por «El lado bueno de las cosas», la actriz confiesa sentirse abrumada tanto por las expectativas que se han creado a su alrededor, como por la invasión de privacidad que llevó a los hackers a robar sus fotos íntimas. « No voy a quejarme de la bendita vida que me ha tocado, pero, obviamente, hay sacrificios que cuestan. Hago lo que me gusta y cada trabajo tiene su lado malo», confiesa.

Agotada después de un intenso año profesional y personal –acaba de terminar su relación con el director de «Madre!», Darren Aronofsky–, Jennifer Lawrence ha anunciado que se toma un tiempo de descanso para dedicarse a la política. «Mi intención es viajar durante un año por todo el país para involucrar a los jóvenes en un movimiento que luche contra la corrupción y que no esté relacionado con ningún partido político, es un grupo llamado “Represent.Us”», anunciaba una actriz que va por libre, difícil de catalogar y que juega combinando personajes excepcionales en películas donde acaba nominada al Oscar con otras comerciales. «Me fascina sentir que estoy haciendo exactamente eso para lo que nací. No podría hacer ningún otro trabajo después de haber encontrado la interpretación », remata.