Jean Reno: «Hacer películas es como hacer el amor, siempre quieres repetir»

A sus 70 años, el francés, hijo predilecto de Andalucía, presenta la primera película española que ha rodado en su prolífica carrera,« 4 latas ». Dirigida por el cordobés Gerardo Olivares, el filme mantiene ese tono nostálgico y divertido que utiliza Jean Reno para hablar de su pasado y de la cinta, una «roadmovie» de dos amigos que en un momento «bajo» de su vida deciden coger un viejo Renault 4 latas para ir a dar una sorpresa a un tercer compañero que está a punto de perecer en el desierto de Tombuctú.

Para Jean Reno, se trata de una «tragicomedia». Una película con un tono diferente, que pasa de la aventura y la felicidad a los pequeños dramas vitales que marcan cada día. «Tengo una respuesta para explicar el tono de la película», dice el intérprete. «Le pedí a Charles Aznavour una canción sobre mis orígenes porque estaba preparando un espectáculo. Hablamos de lo “andalú”, y me dijo: “qué quiere decir”. Y me quedé como un idiota. Busqué que quiere decir “paisano en fuga”. Cuando me dieron la distinción de hijo predilecto, miraba a todos los invitados: alcaldes, diputados... todos estaban muy serios y daban sus discursos, pero no pasaban 40 minutos sin que alguno contara un chiste. Todos se reían y al rato volvían a trabajar muy serios. Eso es ser andaluz, y esa es la respuesta para el tono de la película. La vida es así, algún día te vas a morir, y tienes que buscar el equilibrio entre la risa y lo otro», relata.

La cinta es un homenaje a aquellos aventureros que se metían en el desierto para llegar lo más lejos posible en el interior de verdaderas chatarras. Una historia de amistad y buenos propósitos –y un toque canalla– que ha supuesto una «primera vez» para un actor de la trayectoria de Jean Reno. «Me queda todo por hacer, siempre hay historias nuevas. Es como hacer el amor, puedes hacerlo un millón de veces que siempre quieres repetir. Si el cine te gusta, no quieres dejarlo», que advierte: «Si no te gusta y solo quieres ganar algo de dinero para gastarlo en los caballos, mejor no seas actor. Es lo único que me da pena cuando hablo con mi hijo. Le digo que tiene que encontrar algo que le guste. Estar toda la vida haciendo algo que no te gusta es un castigo. Y a mucha gente le ocurre», sentencia el actor.