Jamie Lee Curtis: «Estoy en el momento más creativo de mi vida desde que nací»

Precisamente por esa infinidad de roles interpretados en todos los géneros cinematográficos e identificables para varias generaciones, la Biennale de Venecia le concede el León de Oro Honorífico por su carrera artística. Cuando la actriz se enteró de tal reconocimiento hace unos meses, primero se sorprendió agradecida, luego cayó en cuenta de que no era tan mayor como para tal agasajo. Le llevó algo de tiempo asumirlo.

Que le premien por su carrera lo ve como que el cierre de un ciclo, el final de la vida. Jamie no está allí. «Estoy en el momento más creativo de mi vida», dijo en el encuentro con la prensa internacional horas antes de la gala.

Alta, espigada, cabello cortísimo y platinado. Llega con llamativas gafas oscuras del estilo de Peggy Guggenheim, «las llevo en su honor», diría, pronto las cambiaría por unas adaptadas más discretas. Bajo el brazo trae a Venecia 'Halloween Kills', la primera parte de la trilogía dirigida por David Gordon-Green y en la que una vez más Jamie Lee Curtis encarna a Laurie Strode.

¡Ah, Laurie! Viéndola en sus terroríficas historias hemos rasgado las butacas de los cines, tapado los ojos y gritado a más no poder. Cuando la presentadora de la rueda de prensa dice Laurie en lugar de Jamie, la actriz estadounidense la mira con la más amplia de sus sonrisas con cara de no-pasa-nada-cariño.

«Laurie y Jamie son la misma cosa», dijo mientras recorre con la mirada la sala llena (en su 50% de capacidad permitida) como una experta oradora y una mujer que indudablemente nació para entretener, «después de 43 años me puedes llamar Laurie o Jamie».

En 1978 John Carpenter le ofreció ese personaje al que está encantada de retornar cada cierto tiempo, un hecho que la intérprete lo tilda de fuera de lo común. «La cosa más emocionante de ser actriz y trabajar con un mismo rol, es que hemos cambiado, y es que la belleza de la condición humana radica en la capacidad de transformarnos, de avanzar», describió.

Aunque a Jamie Lee Curtis se la vea en diferentes géneros, sin dudas es uno de los rostros del cine de terror. Desde Venecia da un salto en el tiempo y recuerda: «El movimiento feminista me odiaba por mi trabajo en películas de terror, ahora adorarían a Laurie Strode, su fuerza, su habilidad para enfrentar las adversidades, sin embargo en aquel entonces era considerada antifeminista».

A la también recordada por su reciente participación en 'Puñales por la espalda' (Rian Johnson), le apetece sincerarse afirmando que en realidad odia las películas de terror, pero reconoce que a través de los filmes de ese género se establece una conexión genuina con el público y sus emociones. «Te logras identificar con Laurie porque tal como ella tú también luchas contra demonios en tu vida», acotó.

Se reconoce como asustadiza. «Si buscáis fotos de mí cuando era niña siempre parezco que estaba aterrorizada», hace una mueca de espanto generando carcajadas, «incluso cuando era una bebe, si no me creéis, voy a subir una foto de esas en las redes sociales para que lo comprobéis».

Curtis recuerda que carece de formación formal en la interpretación, por eso tiene la certeza de que el secreto del éxito de ese rol tan icónico radica además en su condición de miedosa en el hecho de tener «muchos traumas, vi muchas cosas feas en mi vida, por lo que todo lo que me sale viene desde lo vivido», se sinceraba.

'Halloween', 'Un pez llamado Wanda' (Charles Crichton, 1988) y 'Mentiras arriesgadas' (James Cameron, 1994) dice que constituyen su Santa Trinidad, aunque no quiere obviar que entre medio hay otros filmes relevantes como también «un par de piezas de mierda sobre las cuales me sentiría feliz de hablar con vosotros», se ríe.