El indignante sueldo de Marlon Brando en 'Superman', un disgusto que Richard Donner no se llevó a la tumba

Al director de la película, Richard Donner ,  fallecido este lunes a los 91 años en un mal día para que los medios le prestaran la atención debida, no le gustó nada saber que Brando se llevaba un mordisco tan grande del presupuesto. «Cuando aparecí por primera vez en el rodaje y escuché cuánto pagaban a Marlon Brando, estaba realmente molesto , porque parecía mucho más dinero del que merece nadie», dijo Donner en unas declaraciones que recoge 'The Hollywood Reporter' .

Con el tiempo, sin embargo, su indignación cedió y empezó a entender: «Trabajar con él y verlo en la película, para mí, no está pagado », terminó por admitir.

El propio Brando, que ganó incluso dinero por una secuela en la que no trabajó, por otra maniobra legal, explicaba la situación mejor de lo que lo haría nunca Messi : « Todo tiene un precio en el mercado , también los automóviles, los hula hoops y los esfuerzos inútiles. Supongo que los actores no son muy diferentes de las bandas de rock».

Casi lo peor de todo es que, en aquella época al menos, Brando se hizo famoso por no aprenderse sus diálogos , con la excusa de que un uso exagerado de la memoria restaba frescura a la interpretación. «Si no conoces las palabras pero tienes una idea general, luego miras las tarjetas y eso le da al espectador la sensación de que el personaje realmente está buscando las palabras. No sabe lo que va a decir». Hay que reconocer que el argumento es brillante.

Hay un vídeo en YouTub e que recoge la polémica y en el que se pueden ver imágenes del rodaje de 'Superman' . En uno de los momentos más significativos, Brando dice un par de frases, pero entonces la cámara enfoca a los otros personajes y un asistente le pasa al divo un folio con el resto de su discurso, que puede leer tranquilamente, ya que su voz se escucha en off.

Brando, por último, bromea sobre el tamaño de la sonrisa de los actores estadounidenses cada mañana de rodaje, según él proporcional al salario recibido: «Dos dientes por 200.000 dólares, diez dientes por un millón».