Hazte premium Hazte premium

Festival de San Sebastián

El padre de Viggo Mortensen y la mirada santa de Kawase

El actor, único premio Donostia de la edición de este año, presenta su primera película como director, «Falling»

Viggo Mortensen, fotografiado en San Sebastián, donde este año ha recibido el premio Donostia EFE
Oti Rodríguez Marchante

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Todo el mundo conoce a Viggo Mortensen como actor, un tipo de una pieza capaz de ser, en la misma escena, suave y absorbente como una crema hidratante y áspero y encallecido como la corteza de un roble. Y por eso, por actor que domina sus texturas, recibe este año el premio Donostia , aunque se presenta aquí, en esta edición, como director y con su primera película, «Falling» .

«Falling» es un buen drama familiar que aborda ese tema tan de moda desde hace unos dos o tres mil años que es la vejez , y en este caso unida a un proceso de demencia senil . Y lo cierto es que Viggo Mortensen lo trata con enorme sensibilidad y con un punto de vista comprensivo y humano, a pesar de que construye uno de los personajes más mezquinos y nocivos que se recuerdan, lo que se viene llamando un bicho…

Un viejo granjero de lengua podrida y modales de mofeta que tiene que pasar una temporada con su paciente hijo, casado con un hombre y con la intención de que no vuelvan a sangrar las numerosos heridas ocasionadas por la relación con su padre. El veterano actor Lance Henriksen consigue la proeza de construir a alguien irritante, odioso, pero dejando en él pequeñas troneras por las que respire algo de ternura, briznas de sentimiento.

La historia es deprimente y extrañamente conmovedora, con algunas huellas de humor vitriólico y mantiene un elegante equilibrio entre la serenidad de sus formas y las pasiones desbocadas de sus personajes. Mortensen interpreta al hijo, y es tan buen actor que se deja devorar por la actuación extrema y descomunal de Henriksen.

Del lejano oriente

El cine a competición trajo dos películas del lejano Oriente, la china «Wuhai», de Zhou Ziyang , que le deja su espacio en esta crónica a la otra, la japonesa «Madres auténticas», de Naomi Kawase , que da mucho más juego. El cine de Kawase, generalmente muy visto y apreciado aquí («Aguas tranquilas», «Una pastelería en Tokio»…), funciona de un modo especial y está lleno de «naturaleza» que impregna las historias que cuenta: el viento que sopla las hojas, el rayo de sol que bailotea entre las ramas, la espuma de las olas que llegan a la orilla, el pájaro que vuela y entretiene el tiro de la cámara…, en fin, es un cine que acaricia y en el que ver a un villano es tan excepcional como comerse un kilo de caviar (¡qué digo un kilo!…, cincuenta gramos).

En «Madres auténticas» trata la maternidad frustrada y la adopción con una delicadeza que invita más a pañuelo de seda que a kleenex. El relato se desarrolla en dos tramas que apenas se solapan, la de un matrimonio que adopta y la de la joven madre obligada o persuadida por su familia a entregar su bebé al nacer, y ambas están concebidas con esa mirada de santa de Kawase, que envuelve la dureza en gasa y lo turbio en sosiego. Se hace larga, pero se está tan bien en las películas de esta directora que no se le puede reprochar.

Una breve alusión a la película china «Wuhai» , que se pierde alegremente (es un decir) entre la peripecia de un hombre tirando a idiota, que le debe dinero a no se sabe quién y no se sabe quién se lo debe a él, y la de su frágil esposa, que tiene unos cuantos problemas, aunque el más detectable es el de aguantar las idioteces del marido. Probablemente, la película hable de algunas de las cuestiones que atenazan a la actualidad de la sociedad china , sí, pero qué nos van a contar a nosotros de contrariedades e idioteces. Y «Wuhai» acaba sin ningún interés, como el dinero del Banco o yo esto.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación