'Código Emperador', un thriller español sobre las altas esferas que no se queda en lo político
Luis Tosar interpreta a un espía en esta película de suspense dirigida por Jorge Coira y escrita por Jorge Guerricaechevarría
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Iniciar sesiónA Luis Tosar (Lugo, 1971), un tipo menos serio de lo que aparenta, no le hizo mucha gracia que su protagonista en la película de suspense 'Código Emperador' , un espía pluriempleado pero solitario, sedujera por cuenta ajena a una mujer veinte ... años menor que él. A ese personaje, una empleada doméstica filipina, lo interpreta la 'desconocida' Alexandra Masangkay (Barcelona, 1992).
Tosar, nominado al Goya hasta en nueve ocasiones (ganó en tres), habló entonces con el director y la productora de este thriller, Jorge Coira y Emma Lustres . «No me gusta ver este tipo de esquemas reproducidos en la ficción porque al revés nunca ocurre . Son esquemas delicados. Está muy descompensado el mundo y el cine en general. El punto de vista es completamente diferente cuando es al revés », admite el intérprete en conversación telefónica con ABC.
Pero ya era tarde. 'Casting' cerrado. Le buscaron un sentido y un sostén a la relación de amor improbable entre los personajes de Juan y Wendy. Ella es la 'llave' de una de las investigaciones, o instigaciones, del espía protagonista. «De primeras puedes pensar que solamente es una relación romántica, pero hay algo más profundo. Son superdistintos, pero tienen en común la soledad. Para ellos es mucho más seguro estar solos y de repente conectan», añade la actriz.
Tosar tampoco quería caer en lo meloso: «Cuando ya tienes 50 años, uno aboca el amor de otra manera: se ilusiona en mayor o menor medida, pero miras con cierta distancia todo lo que signifique un cambio radical. Es el caso de mi personaje. En el de Alexandra Masangkay, es una persona muy desarraigada por la inmigración y lógicamente muy desconfiada; le cuesta soñar. La gente que está muy golpeada por la vida tampoco concibe el amor de una manera absolutamente fantasiosa».
No es el único personaje femenino que orbita en torno al protagonista. María Botto interpreta a una periodista a la espera de una exclusiva sobre las cloacas del Estado; Tosar es su salvoconducto. «Se habló en su momento de si habíamos tenido o no una relación. Qué más da saberlo. Ahora tienen una relación de trabajo, de mucha confianza y mucho recelo. Hay mucha espera y mucho deseo de que no haya una traición. No sabes en qué momento los informantes van a cambiar de bando», avanza la intérprete argentina, ahora en cartelera también con 'Malnazidos' .
'Código Emperador' inaugura el Festival de Málaga
En 'Código Emperador' , que este viernes 18 inaugura el Festival de Málaga y también llega a las salas de cine, los personajes y espectadores no llegan a descifrar del todo quién trabaja para quién (sí para qué). Miguel Rellán interpreta aquí al superior de Tosar. «Él aporta algo de bondad para generar complejidad en el personaje. Lo que parece no es siempre lo que es», explica Jorge Coira.
El director quería hacer un relato de espías con cierta conexión con la tradición literaria y cinematográfica: «No intentamos que el personaje de Luis Tosar sintetice a toda la gente que trabaja en los servicios de inteligencia, pero transita por sus dilemas y conflictos . Cada uno responde y se porta de una manera. En algunos casos acabas en los medios de comunicación e incluso en la cárcel y en otros llevas una vida más sensata».
Un thriller sobre el mundo del poder
La sombra de Villarejo nunca sobrevuela sobre el guion de Jorge Guerricaechevarría (nominado al Goya en ocho ocasiones; la última, 'Las leyes de la frontera' ). «Es probablemente el personaje más conocido, muy a su pesar, porque hasta hace relativamente muy poco lo era solo en la élite», sostiene Coira. El director cree que hace falta distancia para una ficción, ya de por sí complejísima, sobre el comisario (la serie 'Antidisturbios' sí se atrevió).
Coira defiende que 'Código Emperador' va más allá del concepto 'cloacas del Estado': «El mundo del poder va más allá de la política o de los partidos. Afecta a los políticos, a los empresarios, a la judicatura, al deporte, a la cultura…». Aquí, sobre el papel y en pantalla, algunos crímenes se tapan, otros se fabrican y otros ni siquiera tienen un desenlace. Uno de los verdugos, o víctimas, es un 'joven' político (Denis Gómez) al que le buscan algo más que las cosquillas. «Acabas la película con la sensación de haberte pegado un viaje, una especie de montaña rusa, pero deja muchas preguntas en el aire a las que cada uno es libre de responder como quiere», concluye su director.
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