Ángela Molina: «El cine no morirá nunca, al menos mientras estemos aquí los que estamos»

Le ha tocado recibir el premio en el año más difícil. En la 35 edición de los Goya, Ángela Molina será la única que recoja el «cabezón» sobre el escenario del teatro del Soho de Málaga. « Estos Goya son igual de Goya que siempre, aunque nos tengamos que intuir porque no todos los que deberían estar van a estar », defendió. La pandemia obliga a que los nominados se queden en casa y que solo los presentadores - María Casado y Antonio Banderas -, los entregadores y algunos artistas invitados suban al escenario. Y la galardonada con el premio de Honor, claro, que eso sí, acudirá sola a la gala. «No me va a acompañar nadie porque tenemos que hacerlo lo mejor que podamos. Mi familia lo disfrutará desde casa, como todos».

La Academia de Cine definió a Ángela Molina como «la antidiva» . Hoy, la «actriz más natural del cine español» volvió a dar razones para encajar en esa definición cuando la prensa del corazón le preguntó por el vestido que iba a llevar el 6 de marzo: «No, no, no... Gracias...», dijo, y dejó un silencio suspendido que remató mientras parecía callar una respuesta más contundente: «Queda mucho, en un mes te pueden hacer todos los vestidos que quieran».

Porque Ángela Molina no está aquí por los modelos ni las alfombras rojas , sino por el trabajo y el arte. «El cine no morirá nunca, por lo menos mientras estemos aquí los que estamos», defendió. «Nos estamos salvando milagrosamente. Hay que tener una gran confianza en lo que somos, hay que seguir creando, y si cabe más unidos que nunca», dijo sobre un sector en el que ha vivido desde niña. Eso sí, no se regodea por el pasado. «Sois vosotros los que me hacéis recordar, yo vivo presente, todos los momentos de mi vida son en presente», apunta, y confiesa que adora a la juventud. « Me encanta ver a la gente joven, pero no cambiaría el proceso de la vida por nada . Es emocionante ir viviendo el proceso de la vida durante muchos años».

Ángela Molina ha vivido de todo en sus más de 150 trabajos para cine y televisión. Difícil pensar cómo era moverse en el cine, con apenas 20 años cumplidos, en la época en la que debutó, en los setenta, cuando los productores tenían todo el poder y el destape parecía arrastrar a todo el cine. El abuso de poder y el acoso lo han denunciado muchas actrices, pero Ángel Molina promete no haber tenido «jamás un desencuentro con ningún profesional». « Sinceramente nunca he vivido situaciones de este tipo , tan solo una un poco cómica, antes de hacer mi primera película. Era un productor que ya no está... fui a su despacho y quiso hacer una gracia para acercarse, y saltando a un sillón, él se cayó. Abrí la puerta y me fui», dice, entre risas, quitando importancia a una escena que «parecería de Billy Wilder ». Eso sí, no resta un ápice de importancia a las compañeras que lo han sufrido: «Mi respeto por todas las que han denunciado».