Josu Ternera critica su entrevista con Jordi Évole: «La he visto y le falta hilo político. Han hecho lo que han querido»

Ternera afirma que su objetivo era expresar que «el conflicto es político. Esto significa que lo primero que cualquier Estado le debe a un pueblo oprimido es darle la palabra». Jose Antonio Urrutikoetxea precisa también que no quiso condicionar a los productores ni «decir cómo se hace una película, que es del autor: la forma, el montaje...».

«Quería reflejar que ha sido un conflicto político, con todas las consecuencias duras, crudas y sin vuelta a atrás. Eso es lo que le quería mostrar al público español. Que no piensen que con todos aquellos sucesos alguien sintió placer», insiste el ex dirigente de ETA durante la entrevista.

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Una vez visto 'No me llames Ternera', Urrutikoetxea considera que le falta precisamente «ese hilo político y lo que se explica es mi opinión sobre algunos hechos, algunas acciones duras. Me arriesgué y este no es el resultado que esperaba, pero no interferiré en su trabajo». «Han hecho lo que han querido -prosigue-. Lo digo con todo el respeto, pero tengo otra visión y otra opinión sobre el trabajo resultante».

La decisión de proyectar el documental en el Festival llevó a que 514 intelectuales, víctimas de ETA y políticos, como Mari Mar Blanco, Ana Iribar, Carmelo Barrio, Fernando Savater o Fernando Aramburu, firmaran un manifiesto en el que pedían su retirada de la programación. Sin embargo, el director del certamen, José Luis Rebordinos, respondió en un comunicado que esa carta no llegó, y afirmó que la película «ha de ser vista primero y sometida a crítica después, y no al revés«.

A este respecto, Ternera apunta que ha podido hablar «una vez», con uno de los productores de la película, e indica que corresponde al propio certamen tomar la decisión de mantener su proyección en el cartel, a pesar de la controversia generada.

También admite que, durante el transcurso de la entrevista, confesó a Évole que participó como miembro de ETA en el asesinato del alcalde de Galdakao Victor Legorburu en 1976. Ternera, que no fue procesado por este atentado debido a la Ley de Amnistía, precisa que su declaración se produjo «durante las largas horas de grabación y sin saber cómo surgió el tema».

Legorburu fue tiroteado en plena calle justo el día que vencía un ultimátum que la banda terrorista había dado a todos los regidores para que dimitieran de sus puestos. Una víctima de aquel atentado, que fue entrevistada también en el documental, se enteró por esta vía de que Ternera estuvo detrás del asesinato.