Crítica de 'Monkey man' (**): Brutal y violenta incluso para el género de acción

La historia, de puro rápida, se sigue con dificultad, aunque tal cosa no le afectará a los amantes de este tipo de cine, pues lo que interesa es el atropello de golpes, la furia en progreso y la generosidad en sangre y munición. El director narra con auténtico desparpajo temporal, con habituales interferencias del pasado, los flashback relajantes de la madre, los conflictos amasados por el tiempo y ese presente de venganza y crueldad. Y lo hace mediante un montaje olímpico, con tal profusión y variedad de planos que te secan el lagrimal. Por otra parte, es enormemente creativo visualmente, con ambientaciones singulares y una intensidad en la secuencia que le auguran a Patel un papel protagonista como director.

Puede darse la circunstancia de que a uno no le interese sumirse en este festival de mamporros y en su ritmo frenético y machacón, pero, dentro de ese género tan prostituido, 'Monkey Man' es un buen ejemplo de trabajo bien hecho, con cierto regusto estético (si se puede considerar así) y además, como actor, Dev Patel demuestra un perfil magnífico, casi sensible, y se sitúa junto a los mejores de este tipo de cine, es decir, junto a los más brutos, a los que pegan más fuerte.