La excepción a la regla (***): Beatty and Hughes, sociedad ilimitada
Sorprende por su listeza, mirada, sentido del humor y composición en esta película que mira, entre otras hollywoodeces, al viejo y exasperante Howard Hugues
El gran protagonista de la última ceremonia de los Oscar, Warren Beatty , resuelve las dudas sobre competencia y su plena forma en la cancha (como Messi), que en su caso es un plató, y sorprende por su listeza, mirada, sentido del humor y ... composición en esta película que mira, entre otras hollywoodeces, al viejo y exasperante Howard Hughes, al cual interpreta el propio Beatty con ese pleno derecho de quien también ha tenido el mejor paladar para los placeres de su tiempo y lugar.
Aunque el centro estratégico de la película es él, Beatty/Hughes, l a historia le cede el mejor sitio al romance tortuoso surgido entre su chófer, el joven Frank Forbes, y una chiquilla de pueblo contratada por el magnate para engrosar su lista de aspirantes a estrella.
Este regate a la esencia de lo que quiere contar (la fuerte y extravagante personalidad del viejo millonario cuando ya empezaba a molestar a todo el mundo y su lógica mental era un disparate) le permite a la película tener encanto, melodrama y cinismo, además de ensimismarse en esos segundos términos, el entresuelo de aquel Hollywood en el Olimpo (justo lo contrario de lo que hacía la película de Scorsese, «El aviador»).
Sin llegar al arrebato, Warren Beatty consigue un buen dibujo del cine, las finanzas y el poder , y muy especialmente de aquel sujeto insólito al cual parece conocer y apreciar como a las propias yemas de sus dedos.
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