Hazte premium Hazte premium

Daniel Craig: «Incluso tenemos a Han Solo de cowboy»

El actor inglés presenta junto a Harrison Ford su última película: «Cowboys & Aliens»

Daniel Craig: «Incluso tenemos a Han Solo de cowboy» ABC

ANGÉLICA MARTÍNEZ

Con sus intensos ojos azules que hablan sin decir nada, y con su musculoso cuerpo a prueba de villanos de todo tipo, incluidos aliens, Daniel Craig se ha convertido en el último tipo duro de la gran pantalla. Metido en la piel de un vaquero en la película «Cowboys & Aliens», donde cabalga junto a Harrison Ford, el actor nos obliga a olvidar, viéndole en escena por las praderas de Montana, con su sombrero wrangler y sus pistolas, que además es el mejor 007 de los últimos tiempos. Británico de pro, con maneras de hooligan, en cuanto se le pregunta algo privado o alguien trata de hacerle una foto, Daniel Craig tiene muy claro lo que busca en su carrera y cómo actuar para conseguirlo. Pero fuera de la pantalla es algo así como la versión inglesa de Javier Bardem.

—Su personaje en «Cowboys & Aliens» tiene mucho estilo, ¿en quién se inspiró para crearlo?

—Tuvimos muchas discusiones sobre ese tema. En realidad los cowboys no se sientan, se apoyan, miran, no hablan, así fue como creé este personaje, que es un cruce entre Clint Eastwood y Steve McQueen.

—Muchos piensan que usted se parece a Steve McQueen, ¿le gusta el piropo?

—Es maravilloso. Me produce cierta vergüenza hablar en esos términos porque Steve es un icono del cine y yo no puedo considerarme a su altura. Los pantalones que llevo para disparar están copiados a unos que él vistió en una película.

—Supongo que habrá disfrutado trabajando junto a Harrison Ford.

—Sí. Siempre he admirado su trabajo y ahora que he trabajado con él aún más. Lo más importante para él es que la película sea un éxito. Me contagió su entusiasmo por el proyecto. Quiere ser el mejor actor y yo me identifico con esa forma de ser. Es un tipo sensacional. Una estrella de la vieja escuela. He llegado a pensar que todos los actores deberíamos parecernos más a Harrison Ford.

—¿Es cierto que fue usted quien convenció a Harrison de que trabajara en este proyecto?

—Hice todo lo posible para que participara. Cuando Jon me propuso la idea me pareció sensacional. Desde niño he querido rodar un western, pero hasta ahora nadie me había ofrecido una oportunidad que mereciera la pena. Harrison me pareció perfecto para este filme y su presencia me animó a mí a rodarlo.

—Se ha dado cuenta que usted no pierde el sombrero en ningún momento.

—Fue algo que incluí a propósito. ¿Cuándo has visto a un cowboy perder su sombrero? Nunca (se ríe).

—¿Con ese título es difícil definir la película?

—El título lo dice todo. Nuestro trabajo como actores es no desmerecer a un título como este. Corremos un gran riesgo porque la audiencia no sabe a qué atenerse, pero nos permite ampliar el horizonte hasta convertir el filme en una amalgama de géneros. Hay ciencia ficción, aventura, drama, comedia, western. No se puede pedir más. Tenemos hasta a Han Solo convertido en cowboy.

—Usted se confiesa admirador de los western, ¿por qué era tan importante para usted rodar este tipo de film?

—Quería galopar en una enorme pradera vestido de cowboy y que me pagaran por ello. La experiencia ha sido tan positiva que ya les he pedido a mis agentes buscarme otro western.

—Entre Harrison Ford y usted hay mucha química, pero no excesivo dialogo.

—Nosotros bromeábamos durante el rodaje con Jon Favreau, el director, porque cortábamos nuestras líneas y las convertíamos en un dialogo mínimo. Harrison y yo hablamos mucho sobre ese tema porque no queríamos que los personajes se explicaran a sí mismos. Los vaqueros no dan explicaciones, simplemente mantienen una actitud. Jamás dicen algo así como «no me siento bien por esto o por aquello». Son tipos duros.

—Usted empezó en la televisión con la serie «Our Friends of the North», hace ya quince años. ¿Cómo ve su carrera desde entonces hasta ahora?

—Completamente distinta (se ríe). Todo lo que me ha sucedido en este tiempo ha sido increíble, pero ha ido pasando día a día. No me llegó el éxito de la noche a la mañana. Nunca desistí y hubo momentos en los que a punto estuve de tirar la toalla. Pero no soy una persona que se deleite en el éxito. No pienso demasiado en lo que he conseguido sino en lo que todavía me queda por demostrar.

—¿Cuál es su criterio a la hora de definir el éxito de una película?

—Cuando cientos de millones de personas van a verla y repiten (se ríe). Películas como «Cowboys & Aliens» no se hacen para la crítica sino para la audiencia. Y te voy a ser más sincero, estos filmes comerciales son mis favoritos, el proceso de colaboración es inmenso y lo disfruta una gran cantidad de gente.

—¿Ha deseado alguna vez dirigir?

—No quiero dirigir, me aburriría tener a todo el mundo a mí alrededor preguntándome qué es lo que tienen que hacer.

—Está en mitad de tres franquicias, Milenio, James Bond y «Cowboys & Aliens» ¿Cómo se desprende del actor y vive el hombre en ese mundo?

—Forma parte del proceso. No me importa hablar de mis películas, pero me molesta hablar de mí porque soy un hombre muy celoso de su intimidad.

—¿Que le da miedo en la vida?

—No vivo con temor. Como todo el mundo, cuido de mi familia, los protejo tanto como puedo, pero no tengo miedos.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación