Las 10 mejores películas de 2021: el año de dejarse ver y de sacar pecho

Especialmente, sacar pecho, pues en todas sus grandes citas, desde el Oscar a Festivales como el de Cannes, el de Venecia o el de San Sebastián, puede decirse sin miedo (¿miedo a qué?) que han arrasado las mujeres, las directoras, las actrices. El Oscar lo ganó la película 'Nomadland' y también su directora, Chloé Zhao , y su protagonista, Frances McDormand . En el Festival de Cannes, la Palma de Oro fue para 'Titane', de Julia Ducournau . En el de Venecia, el León de Oro lo ganó Audrey Diwan con la película 'El acontecimiento', y allí triunfó Penélope Cruz con 'Madres paralelas'. Y en el de San Sebastián, la Concha de Oro fue para la rumana Alina Grigori y su película 'Blue Moon'; y las actrices, a pares, Flora Ofelia Hofman y Jessica Chastain .

Y es evidente que esas han sido las tendencias que apuntó el cine durante 2021, la recuperación, la intermitencia, la compatibilización de las salas y las plataformas y, muy especialmente, la de ser un año de máxima visibilidad y éxito para las películas dirigidas por mujeres. Y visto lo cual, y sin ánimo de reprobar esta tendencia (¿miedo a qué?), se elabora aquí una lista de los diez mejores títulos que se han podido ver este año sin que entre ellos aparezca ninguno de los mencionados y premiados, y que, además, llevan la firma de un director.

La gran ganadora de este sondeo (que ha hecho uno consigo mismo) es ' El amor en su lugar ', de Rodrigo Cortés , un prodigio de potencias cinematográficas, de emoción, de encanto y de sabiduría al barajar ingredientes como la música, la comedia, la tragedia y la pasión. Una película que te liga a ella sin ataduras, con esa sensación de 'al vacío' que conocemos por aquellas obras maestras clásicas que te absorben para siempre. Como película para quedarse pegado a ella, no la hay mejor.

Los dos siguientes lugares de la lista los podría ocupar un mismo director, el japonés Ryûsuke Hamaguchi , con dos obras maestras en este año de intermitencias, ' Drive my car ' y ' La ruleta de la fortuna y la fantasía '. La primera, que también fusiona cine y teatro, como la de Rodrigo Cortés, explora lugares insólitos sobre la pareja, la fidelidad, el dolor y la frustración; y la segunda habla de la relación amorosa y artística en tres relatos llenos de narrativa plácida que fabrica zozobra y turbación con sutileza y elegancia. Un hermoso guiño sobre los regates del azar y de las ocasiones perdidas.

A continuación aparecen en el orden que prefieran dos de los más grandes directores de la historia, Steven Spielberg con ' West Side Story ' y Ridley Scott con ' El último duelo '. Si uno no es tonto del todo, enseguida se percata de que en estas dos películas sus directores no necesitan hacerse pasar por innovadores ni modernos (lo ha inventado o reinventado todo). La de Spielberg es luminosa, respetuosa y fantástica en su cuerpo y alma. Y la de Scott es tremenda, lista en su construcción y deconstrucción, y potentísima en su ojo e intención.

Al mismo nivel podría estar un director como Denis Villeneuve , que ha recogido los pedazos del puzle de Frank Herbert (y del pequeño desastre de David Lynch) y ha reconstruido un ' Dune ' espectacular, vistoso, comprensible y hasta emocionante y con futuro. Una proeza digna de un gran cineasta como Villeneuve.

Los puestos siete y ocho se los reparten la película danesa ' Otra ronda ', de Thomas Vinterberg , y la maravillosa ' Noticias del gran mundo ', de Paul Greengrass . La historia de cuatro profesores de instituto que experimentan con el uso del alcohol y la mejora que les procura en su vida laboral y familiar…, naturalmente, la provocación de Vinterberg contiene también sus pequeñas dosis de moral sobre los peligros del bebercio. Y Greengrass ofrece una preciosa crónica en clave de wéstern (no, de antiwéstern, que está tan de moda) del nacimiento de una nación y una relación.

Y aún quedan un par de sitios de honor para el cine español, además del primero que ocupa Rodrigo Cortés. ' El buen patrón ', de Fernando León de Aranoa , y ' Quién lo impide ', de Jonás Trueba . Tan distintas y singulares, tan lúcida, insolente y divertida la primera en su vistazo a las relaciones laborales, y tan bien urdida y trabajada durante años la segunda en su retrato al natural de ese mundo vedado, ese club selecto, que es la juventud mientras se transforma.