SEVILLA AL DÍA
Feminismo necesario
Y no, no hace falta viajar a los estados del burka para toparse con el machismo más feudal
En los años 70, ser feminista era algo revolucionario. Mi madre lo fue y mi abuela, sin declararlo abiertamente, también; porque llevar adelante un negocio y una familia sin que el marido le impusiera las reglas sólo se puede hacer desde el profundo convencimiento de ... que el género no define la valía de una persona. Aquellas victorias logradas en el pasado empiezan a estar en peligro en una sociedad relajada en la que los derechos se heredan y la memoria flaquea. Se suma también esa corriente feminista que divide a las mujeres, señalando las opiniones discrepantes, que cuestionan la eficacia del movimiento que da lecciones desde la moqueta, ejerce políticas inútiles y esgrime como gran valor carteras moradas, frente a la verdadera realidad que siguen soportando muchas mujeres en todo el mundo. Y no, no hace falta viajar a los estados del burka para toparse con el machismo más feudal.
A Gisèle Pelicot la violaron durante años más de medio centenar de tipos porque su marido la ofreció como carne fresca en un portal de internet. Muchos de los violadores defendieron su inocencia en el juicio alegando que el marido estaba al corriente de lo que le sucedía a la mujer, que nunca supo lo que estaba pasando porque estaba drogada. Sólo la convicción absoluta del poder masculino sobre la mujer puede explicar semejante aberración y eso ocurrió aquí al lado, en la Francia de la liberté, ègalité, fraternité.
Prosigamos este viaje y saltemos un charco inmenso para adentrarnos en una democracia, ahora fuertemente cuestionada, que se jacta además de ser la nación más poderosa del mundo, al mando de un señor adicto a la caña de azúcar. Allí hay todo un movimiento liderado –ojo– por mujeres que proclaman sin ambages la vuelta de ellas al hogar, el mandil y la crianza de niños, llegando incluso a cuestionarse la utilidad del derecho al voto femenino si ya hay un cabeza de familia que decida por ellas. Unos mensajes que se están viralizando en redes en pleno siglo XXI y que no proponen esta opción vital como algo voluntario de las mujeres sino como el único camino que realmente va a redimirnos ante el fracaso de no haber sido madres a temprana edad.
Volvamos a casa. Dicen que en España tenemos al gobierno más progresista y que mejor nos defiende a pesar de haber contado con un ministro que enchufaba a su amante ¿o prostituta? en empresas públicas; a líderes morales de la izquierda que acosan a mujeres y a compañeros de partido que callan para no perder votos. Es el mismo ejecutivo que también propició la excarcelación de agresores sexuales por llevar a cabo una auténtica chapuza legal.
A ti hija, que acabas de cumplir siete años y me preguntaste si los niños son mejores que las niñas porque lo escuchaste el otro día en el patio del colegio, te digo: feminismo más que nunca.
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