todo irá bien

Dani en Tailandia

Dani estaba como el escritor en 'Misery' de Stephen King

No soy culpable (2/8/2023)

09/08/2023
Actualizado a las 19:04h.

El tipo de presión, la «jaula de cristal» a la que Daniel Sancho estaba siendo sometido no se puede tratar a la ligera y constituye una violencia psicológica muy intensa y sibilina, a la que cedes sin darte cuenta y cuando quieres reaccionar lo ... intentas y no puedes y enloqueces. Dani ha sido víctima de lo que mi abuela llamaba, cuando podíamos hablar en libertad, «la mala leche del maricón», que es retorcida, perversa, desesperante y puede llevarte a la enajenación. Luego está Tailandia con su rey sátrapa, su sistema judicial que es un mito y el valor tan bajo que allí tiene la vida humana. Tailandia desborda los límites civilizados. Es un país endiablado que propicia en ti lo atroz con su falsa hospitalidad superficial que esconde a un pueblo hostil, más malencarado que los vietnamitas en 'El cazador'.

Dani Sancho se vio superado por el secuestro mental de un gay retorcido y mañoso que le amenazó con publicar las fotos de ambos haciendo guarradas si le abandonaba. Sus alternativas eran todas malas: o cedía a su chantaje y continuaba siendo su juguete sexual; o veía su vida destrozada por la publicidad de su homosexualismo; o huía hacia adelante y lo mataba. Vivía tan al límite, tan agobiado por la intromisión del doctor en su vida, que no era capaz de hallar la serenidad de una salida razonada, y las ideas que le venían a la cabeza eran todas enfermizas. Para entender a Dani, estaba como el escritor en 'Misery' de Stephen King. Mató, sí. Pero para escapar de la cárcel mental en la que su acosador le había encerrado. Lo del despiece para ocultar el cadáver fue el último desvarío que aquella relación le provocó.

Es verdad que para ser justos hay que decir también que Dani se buscó un poco el drama, con su melenita rubia de coquetín, de pipiloco, viviendo como un rajá a costa de un pagano enamorado. Aceptó invitaciones, regalos e intercambio de fluidos que hay que ser muy bobo o muy puta para no asumir que más temprano que tarde te van a comprometer hasta mancharte.

Pero en cualquier caso la prioridad ha de ser traer a Dani a España. Son infrahumanas aquellas cárceles y si hay que comprar al rey loco, se compra. Una vez en Madrid, que le vean un cura y un psiquiatra y que juntos evalúen el grado de conciencia que tuvo en la comisión de los hechos y qué tipo de tratamiento y redención necesita para volver a la tranquilidad. Cuando la Justicia se encargue de establecer su pena todo esto habrá de tenerlo en cuenta.

Si estás sometido a una presión brutal o a un linchamiento puedes cometer y a la vez no cometer un delito. Lo hizo él pero al mismo tiempo no era él quien habitaba el cuerpo que delinquía, sino un ser desordenado, tumefacto, oscurecido. En Tailandia hay restaurantes y hoteles de gran categoría pero es una sociedad inmoral, destruida, que fomenta una confusión hipócrita y vil para atraer a los turistas y sus fortunas dando rienda suelta a sus más tenebrosas fantasías.