Suscribete a
ABC Premium

vivimos como suizos

Al fin solos

Compartir habitación con otro enfermo no es la más deseable manera de morirse

Y un saxofón

No va ni muerta

Rosa Belmonte

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Prefiero vivir sola que acompañada, pero también prefiero morir sola que acompañada. Morir sola, no sé, como Coco Chanel en el Ritz de París. Aunque morir en el extranjero sea una ordinariez (ordinariez para mí, no para ella, que era francesa). Leía ayer en ABC que una señora viuda deja su herencia ... para que pacientes terminales no mueran en una habitación compartida. Su marido entró en el hospital por dolores que fueron un cáncer de páncreas terminal. Entró un 16 de septiembre y murió el 10 de octubre. Sólo estuvieron solos las últimas 24 horas. «Hasta entonces, compartíamos habitación con otro enfermo, separados por una cortina». En Son Llatzer (Palma) ya existen habitaciones de últimos días, pero el hospital va a cumplir la voluntad del matrimonio. O adaptando la habitación 475, donde el señor murió, o creando un nuevo espacio que permita esa intimidad.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia