vivimos como suizos
Enmascarados
Bardella es un producto privilegiado con papeletas para ser primer ministro francés
De lo dicho no hay na
Hidras
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Iniciar sesiónVariación de comunismo o libertad. En Francia parece que hay que elegir entre islamismo y ultraderecha. El establo de la morería o Le Pen. Cortarse las venas o dejárselas largas. Sale el yerno perfecto, Jordan Bardella, y apela al voto de las mujeres porque en ... Agrupación Nacional están por los derechos de las mujeres. ¿Por qué voy a dudar de que Marine Le Pen defienda a las mujeres? Bardella es un producto desendemoniado con papeletas para ser primer ministro. Un jovenzuelo privilegiado (Attal) por otro. Bardella presumirá de madre soltera y de haber crecido en Saint Denis, pero su papá rico le pagó colegios privados y le llevaba de vacaciones a EE. UU. De Mbappé ha dicho que es un multimillonario con avión privado que da lecciones a los que ganan 1.400 al mes. Podía ser original y decir sobre los futbolistas lo que H. L. Mencken sobre los historiadores. «La desgracia de la humanidad es que su historia esté principalmente escrita por hombres de tercera categoría». El hombre de primer nivel actúa. «La escritura de la historia se relega a profesores de la universidad, moralistas, teóricos, cabezas huecas. Pocos historiadores, grandes o pequeños, han mostrado tener capacidad para enfrentarse a los asuntos que presumen de saber describir e interpretar». Y añade que Gibbon fracasó como miembro del Parlamento. Por lo menos Mbappé es un hombre de acción. Y hasta enmascarado.
Roberto Vaquero es autor de 'Por qué el obrero vota a la derecha' (La Esfera de los Libros). Dice que al obrero no le preocupa ni el ecologismo ni la liberación animal, sino el paro y la delincuencia. Es lo mismo que tantas veces recuerdo del documental francés 'Regreso a Reims', que cuenta cómo la clase obrera pasó de votar a partidos de izquierda a votar a Le Pen. Y, después de que votaran a favor del aborto como libertad garantizada en la Constitución ni siquiera tiene sentido aquel diálogo entre madre e hija: «Mamá, si están en contra del aborto». «Pero yo no les voto por eso».
Todo hombre de bien sueña en secreto y con vergüenza con un Bukele, pero se conforma con un Mbappé.
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