Suscribete a
ABC Premium

TIEMPO RECOBRADO

Cuatro o cinco cosas que yo sé de él

Jaime Botín era una persona tolerante que sabía escuchar y preguntar. He conocido muy pocos hombres con menos prejuicios

Siempre nos quedará Bayona

¿El final del 'procés'?

Pedro García Cuartango

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Ha muerto un amigo: Jaime Botín. La palabra lo dice todo: un amigo es alguien a quien se quiere. Su desaparición deja un profundo sentimiento de desolación y de pérdida. Las trivialidades y el rencor que en algunos ha producido su desaparición me obligan ... a dar testimonio de que Jaime era un hombre bueno y recto. En los últimos diez años de su vida, hemos mantenido una relación muy cercana, basada en nuestro mutuo amor a la filosofía, las humanidades y los clásicos. Jaime recibía clases de latín y su empeño era tal que mantenía fluidas conversaciones con su profesor en la lengua de Cicerón. Discutíamos sobre Spinoza, pero jamás intercambiamos ni una sola palabra sobre asuntos bancarios.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia