desde ogigia
Malinche, la alegría y la envidia
Lo sucedido tras el estreno del musical Malinche, además de poner al descubierto el plumero de los que se quedan sin influencia, ilustra un choque. Choque entre la excelencia de una obra única, bella y desconcertante (es a la vez ligera y ambiciosa, profunda y picante) y la desnudez intelectual y moral de los sectarios que escupen al cielo
Cultura es lo que diga la izquierda. Esto ya era así mucho antes de la gran mutación, de la irremisible conversión del progresismo en pura reacción, relativismo cognitivo, irracionalidad y trágala cancelador. La apropiación de lo cultural tenía su lado bueno cuando, lejos de expulsar, ...
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