COLUMNAS SIN FUSTE
Flatur
Madrid ofrece un hedonismo glotón que en invierno será además garbancero pues incluirá el preceptivo cocido
A la izquierda no le ha gustado el vídeo turístico promocional de Madrid. En lugar de mandar a Fitur un documental de realismo social sobre Orcasitas y 'nuestros barrios', la Comunidad ha optado por el habitual surtido de tópicos consumistas para que el de fuera ... se deje los cuartos.
A los críticos les ha parecido especialmente malo, por clasista, el campo de golf, sin querer entender que aparece precisamente por eso, como reclamo al público pudiente o 'aspiracional'.
También les molesta la participación de Mario Vaquerizo, cuya abrazo con Ayuso ahora comprendemos mejor, exactamente el mismo abrazo que lleva décadas dándose el PSOE con 'los de la cultura'. Con casticismo neomasculino, Vaquerizo encarna el homenaje del liberalismo de terracita a la figura económica y cultural del camarero.
Pero hay otra crítica posible al anuncio: ese Madrid resulta insostenible, gástricamente insostenible. Madrid visto como urbe hostelera exige a los de fuera, pero también a los de dentro, un consumo constante que está recogido en el vídeo: zumito al despertar, desayuno fuera, vermú, comida regada con buen vino, el picar vespertino, la cena, copas nocturnas y chocolate con churros al terminar... Cualquiera que haga esto acaba descompuesto al día siguiente, o, al menos, en avanzado estado de flatulencia (considerando, además, que en los viajes hay siempre cierto retraimiento intestinal).
Madrid ofrece un hedonismo glotón que en invierno será además garbancero pues incluirá el preceptivo cocido. Si se le suman las 'cañitas', unidad social inexcusable (a más amigos, más cañitas), con gases que tarde o temprano darán la cara, el resultado será flato y sudores fríos, bien visibles en Atocha al día siguiente en los rostros de quienes escapan a su ciudad de origen. Se les puede ver en el tren dispépticos, hipantes, eructantes, sin poder reprimir ese pequeño regüeldo que también es Madrid. ¡En ese eructillo, gástrico tornasol, está condensado Madrid! ¡Todos sus sabores en uno! ¡Quintaesencia de su 'estilo de vida'! Proustianamente hará revivir, como un anuncio de Fitur, todas las imágenes del fin de semana.