Suscribete a
ABC Premium

editorial

Olvidados por España

El Gobierno otorga pasaportes con generosidad, pero se niega a ejercer la mínima defensa consular cuando sus ciudadanos son enemigos del régimen bolivariano

Editorial

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La denuncia que efectúan los familiares de veinte presos políticos venezolanos con nacionalidad española estremece por su crudeza y su carga moral. Se trata de ciudadanos que, con doble nacionalidad adquirida o por ascendencia, se encuentran aislados en prisiones señaladas por las organizaciones de ... derechos humanos por su crueldad como el Rodeo I o el Helicoide, sin juicio, en condiciones infrahumanas y sin la más mínima protección consular por parte del Gobierno de España. Y aquí aflora una contradicción que resulta sencillamente intolerable. El Ejecutivo de Sánchez ha sido muy generoso en los últimos años para facilitar la adquisición de la nacionalidad española a cualquier descendiente de españoles, incluso con vínculos lejanos en el tiempo. Esto se ha presentado como un acto de justicia y de reparación histórica, y en muchos casos lo es. Pero cuando toca ejercer la contraparte del vínculo nacional –es decir, brindar protección activa y efectiva a estos ciudadanos en situación de vulnerabilidad extrema–, el Gobierno se vuelve pusilánime, escurridizo y cobarde.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia